Seminaristas reflexionaron en torno a la crisis de las instituciones

Para el Padre Fernando Valdivieso, Prefecto de Teología o Configurativa y Director de Estudios del Seminario Pontificio Mayor de Santiago, la importancia de una formación sacerdotal seria, académica y contundente pero práctica se logra incorporando talleres complementarios para los estudiantes, permitiéndoles vivir de cerca la realidad social de las comunidades. Valdivieso afirma que la forma más fácil de describirlo es a través de una imagen "el sacerdote tiene que tener por tarea un oído puesto con mucha fuerza en Dios y tiene que tener el otro oído puesto en el corazón del Pueblo de Dios". dijo. Para tener una visión de lo que ocurre en la sociedad es necesario informarse "eso significa conocer las encuestas que es muy importante, pero no solo eso, es importante escuchar a las personas concretamente, compartir su dolor, hacerlo propio y para eso las encuestas son un buen instrumento" aseveró.

El aporte de una mirada externa

Frente al panorama social actual en el país y la publicación de la más reciente Encuesta Bicentenario, Roberto Méndez, profesor titular en la Escuela de Gobierno UC, participó de la jornada, mostrando resultados y gráficos comparativos que revelan un contexto global con respecto al deterioro de la creencia en las instituciones sociales y de bien público, durante los últimos 20 años. "Estamos frente a una sociedad más crítica a las instituciones", explicó Méndez.

Durante su exposición, Méndez señaló que se produjo una debacle en la baja de creyentes católicos, destacando las diferencias entre los grupos etáreos y la relación de los mismos a la religión católica. Asimismo, la muestra de ciudadanos para la encuesta contempló todos los sectores de la población, incluyendo migrantes. "El mundo católico está fortaleciendo a las comunidades (...) la Iglesia tiene que acercarse y trabajar con estos grupos que tienen distintas sensibilidades de manera menos institucional y más personal", exhortó, agregando que la faceta más relevante de estos resultados, era entender la importancia de poner a la persona en el centro. "Esta crisis no se supera con institucionalidad, sino con las personas".

La importancia de volver al origen

La segunda parte del taller contó con la participación del profesor Valerio Fuenzalida, experto en estudios bíblicos. En su exposición, el académico se refirió a las distintas crisis por las que ha atravesado la Iglesia a través de su historia y como ha sido capaz de sortearlas para finalmente construirse a partir de ellas. También entregó las directrices que, desde su punto de vista, deberían ser consideradas a la hora de recuperar la confianza de fieles y laicos con la institución.

El profesor se remontó a la Iglesia primitiva, desde los conflictos entre los apóstoles y sus posturas –y lo acontecido con la posterior muerte de los mismos- a la escritura del Evangelio, hito que pasa la historia de Jesús de la tradición oral a la escrita como un camino a la institucionalización de la Iglesia. Por otro lado, también se refirió a las primeras divergencias que tuvo con la ciencia.

Citando a la profesora UC Claudia Labarca, Fuenzalida se refirió a la importancia de recuperar la confianza en la población, mostrando una Iglesia capaz, íntegra y empática con la comunidad en la que está inserta. Para el profesor es fundamental fortalecer las habilidades de actuar en la sociedad de manera honesta e íntegra, estableciendo relaciones con fieles y laicos, mirando el conflicto social que hoy vive nuestro país como una oportunidad. Habló de un "capital acumulado" en el área de justicia y paz social (desde León XIII con la creación de la doctrina social de la iglesia) hasta la mirada del Papa Francisco sobre la crisis ambiental "La Iglesia puede afrontar las dificultades del desgaste de un sistema social que está haciendo crisis por todos lados" dijo.

Su visión es optimista y su llamado es a mirar hacia al pasado ya que según indicó "nos tiene que ayudar a no tener miedo, a mirar qué situaciones críticas son parte de la vida (...) que estos no son tiempos apocalípticos, sino que son tiempos que hay que encontrar la salida". Fuenzalida se refirió al contexto actual como una oportunidad para acercarse a los sectores que viven una espiritualidad no necesariamente confesional en una religión, desde una Iglesia más pluralista.

Una visión transgresora

Para el profesor Valerio, se debería alcanzar una iglesia laical (como en sus inicios) poniendo énfasis en la misión de los laicos -más allá de la sacristía- en su tarea cristiana de construir una sociedad fraterna. Destacó también la importancia de incluir a la mujer en la Iglesia; especialmente aquellas pobladoras desvalidas, argumentando que si la Iglesia las empodera "a lo mejor descubre líneas de trabajo que pueden hacer que estas mujeres tengan un rol distinto al que tienen en Chile" dijo. Para finalizar puso hincapié en la necesidad de convocar a los jóvenes a luchar por una causa, actualizando la idea de la tradición cristiana de la salvación.