Presentación del documento "Fui forastero y me recibieron" en el Arzobispado de Santiago: Una mirada cristiana a la migración

La mesa estuvo presidida por el arzobispo de Santiago, monseñor Fernando Chomali G., quien destacó la visión integral que el documento propone sobre la migración. Citando al Papa Francisco, monseñor Chomali subrayó que "el todo es más que las partes". Afirmó que el documento de la Conferencia Episcopal de Chile promueve ver la migración como un aporte y no como una amenaza. 

"Este documento de trabajo, con 51 páginas y múltiples citas de fuentes académicas, legales y bíblicas, busca iluminar el fenómeno migratorio a la luz del Evangelio. Su objetivo es fomentar actitudes humanas, evangélicas y magnánimas hacia los migrantes, reconociéndolos como seres humanos que merecen acogida, protección, promoción e integración", señaló monseñor. También añadió que comprender y abordar la migración es esencial para construir una sociedad más justa y solidaria.

Seguidamente, Luis Eduardo Thayer, director del Servicio Nacional de Migraciones y panelista, resaltó la necesidad de una perspectiva común que incluya a la Iglesia, gremios, organismos internacionales y el Estado en la gestión de la migración. 

"Es crucial reconocer que la migración debe abordarse con una perspectiva común. La política migratoria debe enfocarse en la realidad territorial y la interculturalidad, promoviendo la regularización y documentación efectiva de los migrantes para facilitar su integración social y laboral", expresó Thayer. También destacó la importancia de mantener políticas migratorias humanitarias y la necesidad de alianzas estratégicas para avanzar en este ámbito.

En la misma línea, Delfina Lawson, Oficial de Protección del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ACNUR, agradeció la invitación y reconoció el trabajo de la Iglesia y otras organizaciones en apoyo a migrantes y personas vulnerables. 

En donde se recordó que Jesús también fue refugiado y llamó a acoger, proteger, promover e integrar a todos, creando oportunidades para nacionales y extranjeros por igual. Compartió la historia de María, una refugiada colombiana en Chile, para ilustrar cómo la acogida y el apoyo pueden transformar vidas. "El documento nos llama a enfrentar discursos de odio, fomentar la inclusión y entender que esto favorece la seguridad y la coexistencia pacífica", subrayó.

Finalmente, Pablo Bobic, gerente legal de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), abordó la importancia de la migración en la historia de Chile y su impacto en la economía del país. 

Bobic, migrante y descendiente de migrantes, resaltó que la población migrante ha aumentado significativamente en los últimos años, lo que ha generado tensiones y problemas de seguridad percibidos. "La integración y regularización de los migrantes es una responsabilidad colectiva. Chile necesita trabajar coordinadamente con otros países para gestionar los flujos migratorios. Las empresas prefieren la formalidad para evitar problemas legales y laborales, y para aprovechar mejor los talentos disponibles", concluyó.

En resumen, la presentación del documento "Fui forastero y me recibieron" subraya la importancia de una visión integral y humana de la migración, promoviendo la inclusión y el respeto hacia los migrantes, y recordándonos que la construcción de una sociedad justa y solidaria es una tarea de todos.