Extraordinarios: Irma Basualto Pavez

"Hace unos años una de mis hijas se enfermó de cáncer y después de pasar por una etapa de incomprensión, nos entregamos a Dios. Para mí fue muy importante recordar una frase que me dijo de niña una monjita: “No hay nada en el mundo que se le pueda oponer al rezo del rosario”; así que me aferré a eso. Mi hija se recuperó y ni el médico se explica cómo. Con eso en mente, a principios de la pandemia propuse a mi parroquia que nos organizáramos para orar. Al párroco Alejandro Rivera le gustó la idea y me animó a pensar de qué forma podíamos hacerlo para respetar las medidas. Yo tampoco podía salir de mi casa, así que organicé una oración por WhatsApp. Desde el 2 junio a las 22:00 horas no paramos más. Todos los días a esa misma hora mando imágenes con la oración por chat y vamos dando tiempo para cada parte. Primero encomendamos a los enfermos y difuntos por la pandemia, oramos al Espíritu Santo, seguimos con una versión breve de la Coronilla de la Divina Misericordia y terminamos con una canción. Partimos solo unos pocos adultos mayores de mi parroquia, pero ahora la oración llega incluso a otros países. De vuelta sólo hemos recibido bendiciones y agradecimiento. Es en tiempos difíciles cuando tenemos que dar testimonio de nuestra fe”.

Para recibir la oración o agregar peticiones escribir al WhatsApp de Irma
+56 9 8451 2154

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