Lunes 10 de diciembre de 2018
Cinco candidatos a diáconos permanentes recibieron Ministerio del Acolitado
Este Segundo domingo de Adviento y en la capilla San José de la comuna de Recoleta, cada uno de los candidatos de distintas parroquias de la zona Norte, dieron un paso importante en su camino al diaconado permanente para la Iglesia de Santiago.
Periodista: Enrique Astudillo Baeza
Fuente: Iglesia de Santiago
Link fuente: www.iglesiadesantiago.cl
Acompañados de sus esposas, hijos, familiares, amigos y diáconos permanentes de la zona Norte, uno a uno de los candidatos fue ingresando a la capilla para celebrar la eucaristía, la cual fue presidida por el Vicario de la Zona Norte, padre Ignacio Gramsch y concelebrada por algunos de los párrocos que acompañaron a los futuros diáconos.
Tras las lecturas dominicales, se leyó el decreto y la presentación de los candidatos, quienes con voz firme, respondieron afirmativamente al llamado y se acercaron al altar para ser instituidos para el Ministerio del Acolitado. Junto con ello, recibieron la patena con las hostias, que representa el servicio de ayuda al presbítero en la eucaristía.
Los candidatos son:
Luis Arancibia, parroquia Milagroso Niño Jesús de Praga de Independencia.
Raúl Barros, parroquia Nuestra Señora del Carmen de Quilicura.
Juan Gálvez, parroquia San Inés de Huechuraba.
Remigio Mardones, parroquia Santos Apóstoles de Recoleta.
Juan Mardones, parroquia La Estampa Volada de Independencia.
El padre Ignacio Gramsch en su homilía, agradeció a Dios por momento que viven estos candidatos a diáconos y recordó la trascendencia que tiene para la Iglesia: "A ustedes, se les confía la misión de ayudar a los presbíteros y diáconos en su ministerio y distribuir, como ministros extraordinarios, la sagrada comunión a los fieles, incluso enfermos, ya que van a ser destinados de un modo especial al ministerio eucarístico. Deben vivir desde ahora más íntimamente unidos y más perfectamente identificados con el sacrificio del Señor".
Así mismo, valoró inmensamente el rol que juegan las esposas en el discernimiento de estos cinco candidatos: "Detrás de todo este servicio está la familia, sus esposas, que demuestran el gran amor a Cristo. Ellos se disponen a crecer, a mejorar y a tratar de imitar a Jesús en su vida matrimonial y en su camino al diaconado".
Remigio Mardones, uno de los candidatos, que pertenece a la parroquia Santos Apóstoles de Recoleta, manifestó su alegría por seguir avanzando camino al diaconado: "Yo me acuerdo de los primeros días, hace ya como seis años, en el primer año de discernimiento, le pregunté a mi esposa cuál iba a ser el camino, qué actitud íbamos a tomar, y juntos dijimos, Señor que se haga tu voluntad. Y hoy siento eso, que he hecho lo que el Señor quiere y verlo además acompañado de mi comunidad parroquial, es muy hermoso".
Marisol Collío, esposa de Remigio, rescató también la importancia del acompañamiento que realiza la mujer en este periodo: "Es un día muy especial para mí, para la familia, porque este es un signo de que Dios está con nosotros y que tenemos que fiarnos de Él y estar dispuestos a hacer la voluntad de Dios todos los días, ya que Él lo tiene todo dispuesto".
Juan Mardones, otro de los candidatos, reflexionó alegremente el rito del acolitado celebrado este domingo: "Es un momento muy importante, donde veo que el Señor me ayuda a que salgamos adelante junto a mi familia, porque ellos también dan el sí, a través de su esperanza, de su amor. Recibir este ministerio en Adviento, para mí ha sido algo muy especial".
Isabel Ávila, esposa de Juan Mardones, extendió la felicidad por el signo recibido: "Desde el primer día que vivimos este servicio, los presbíteros le han dado un gran lograr a las esposas y yo he acompañado a mi esposo en todos estos años. Es un regalo para mi familia, para mi matrimonio. Estoy muy feliz".
El padre Andrés Moro, párroco de La Estampa Volada en Independencia, también tuvo palabras de agradecimiento a Dios por la instancia vivida: "Como comunidad parroquial nos alegramos por este importante paso dentro de su formación. También es un signo importante para nuestra zona que cinco compañeros, de distintas parroquias, reciban este ministerio. Es una invitación a que muchas comunidades también sigan orando para que tengamos santos sacerdotes, consagrados y consagradas diáconos permanentes".
Al finalizar la misa, cada uno de los futuros diáconos tuvo un tiempo para compartir con sus familiares y amigos que los acompañaron desde sus respectivas parroquias en tan importante momento.