Semana Teológico Pastoral, una jornada para el ejercicio de escuchar

La religiosa ofreció una panorámica y profundizó diversos aspectos de la actitud de escucha de Jesucristo, de diálogo y también las preguntas que planteó durante su misión y que relatan los evangelios. La hermana Marcela también contó su experiencia de escuchar en el Consejo de Prevención de Abusos a quienes han sido víctimas. Aseguró que en esa entidad episcopal el tema de los abusos "se siente como un terremoto potente, que deja poco en pie. Pero también es una oportunidad enorme". Otro desafío que marcó es "vivir la escucha familiarizados con Jesús, como Palabra viva, que nos va engendrando".

En la segunda parte se desarrolló un panel, que consistió en un ejercicio de escucha de lo que diversas personas le piden a la Iglesia. Participaron Constanza Santa María, periodista de canal 13 y conductora del noticiero central; el doctor Ricardo Capponi, psiquiatra, psicoanalista, médico cirujano, y Tegualda Guzmán, agente pastoral de la parroquia San Luis Beltrán y miembro del equipo de formación del Departamento de Formación de Ambientes Sanos de la Arquidiócesis de Santiago.

Qué pide la comunidad a la Iglesia

Constanza Santa María señaló que conoce a la Iglesia por los diversos acontecimientos eclesiales que le ha correspondido reportear, pero también porque ella y su familia son católicas. Se refrió a la "rabia" que producen los hechos de abusos; que la crisis no es culpa de los medios, aunque reconoce que en algunos casos ha habido errores, "pero el problema son los abusos y no el darlos a conocer". Luego, accedió a revelar qué es lo que ella pide a la Iglesia: transparencia total, sin protección ni encubrimiento; más humildad para reconocer los errores y pedir perdón; estar del lado de las víctimas; mostrar la Iglesia de los centros de menores, la de los sacerdotes en las poblaciones, la que está "donde las papas queman"; más cercanía, menos jerarquía; transversalidad con los laicos; más igualdad, entre jefes y subordinados, entre hombres y mujeres; ser una Iglesia más alegre, optimista, positiva; ser más juvenil, pensar en los jóvenes, que "no son malos, son diferentes".

Luego, la psicóloga Paulina Pérez, de la Delegación para la Verdad y la Paz, que moderó este panel, ofreció la palabra al doctor Ricardo Capponi. El psicoanalista señaló que cuando una persona u organización enfrenta mal una crisis tiende a extremar su culpa y a paralizarse. "Las crisis son oportunidades de crecimiento", dijo, y señaló que el foco de la crisis actual de la Iglesia no hay que ponerlo en el ámbito judicial y legalista, aunque hay que abordarlo, pero, indicó, el primer paso que tiene que dar la Iglesia "es comprender lo que está pasando, y lo que ha pasado es que la Iglesia no ha incorporado la dimensión de la sociedad que tiene que ver con afectividad, sexualidad, impulso".

Otra etapa para superar la crisis que resaltó el doctor Capponi es la necesidad de la reparación, "que va a dar a la sociedad un signo claro de que la Iglesia ha comprendido el fenómeno y, por lo tanto, no está todo totalmente perdido". Proceso reparador que tiene que venir desde las bases, lo que implica "un cambio cultural con un buen liderazgo".

Finalmente, intervino la agente pastoral Tegualda Guzmán, con experiencia en la vida comunitaria, que previamente consultó a sus comunidades para hacer sus requerimientos a la Iglesia jerárquica. Estos son: que los párrocos y obispos conozcan la historia y el quehacer de sus comunidades, respeten sus procesos y que no impongan sin contrapeso sus proyectos pastorales; el fortalecimiento de los consejos pastorales parroquiales, en los que pide mayor confianza en las mujeres, "que conocemos bien la teología de lo cotidiano", y, por último, acrecentar la dimensión comunitaria de la Iglesia, con acento en una mejor formación de los laicos.

Entre los asistentes a esta segunda jornada de la Semana Teológico Pastoral estaba la hermana Frida Álvarez Zurita, Franciscanas Misioneras de María, quien dijo estar "muy contenta de que tengamos esta instancia de formación, con objetivos y desafíos muy concretos que necesitamos hoy. Necesitamos escuchar y escucharnos, sanar, purificar y lograr esta Iglesia nueva que estamos deseando todos. Necesitamos nacer como Iglesia de nuevo, junto al Papa y a nuestros pastores".