Lunes 23 de octubre de 2017
Presbiterio Zona Sur se reunió con el cardenal Ezzati
El pasado jueves 19 de octubre los consagrados de la Zona Sur de Santiago sostuvieron un encuentro con el Arzobispo de Santiago, para conversar temas pastorales y escuchar el mensaje del cardenal frente al momento que vive el país.
Fotos: Nibaldo Pérez
Periodista: José Francisco Contreras
Fuente: Comunicaciones Santiago
Link fuente: http://www.iglesiadesantiago.cl
Señaló que uno de los problemas fundamentales es el de la secularización, una de cuyas manifestaciones es su postura frente a la vida del que está por nacer. Al respecto, el arzobispo reiteró "el valor de la vida, desde la concepción hasta la muerte natural", y la decisión de la Iglesia de acompañar a las mujeres que, encontrándose en situaciones difíciles "quieren ser fieles a ese respeto de la vida, y también tenderles una mano a las que opten en conciencia seguir otros caminos".
Luego, recordando su homilía en el mencionado Te Deum, se refirió al tema de la corrupción, al que se calificó como "un cáncer de la sociedad chilena de este tiempo", y que ha salido a la luz pública en varios sectores de la sociedad. "Pensábamos hace unos diez o quince años que la corrupción era un mal de algunos pases de América del Sur, pero el mal estaba. El que aparezca el mal no es un mal porque aparece, sino que el mal ya estaba".
También volvió a referirse a realidades como los migrantes, la violencia el narcotráfico y recordó el llamado que hizo a los creyentes a "no quedarse al margen de la construcción de la ciudad, sino involucrarse en primera persona en la vida del país, teniendo presente los valores fundamentales, la identidad, el alma del país".
Las descalificaciones no le hacen bien al país
En otro ámbito del mensaje al presbiterio del Zona Norte, el cardenal Ezzati abordó temas como la dimensión cultural de los chilenos, especialmente en la política en estos días, en que hay descalificaciones mutuas entre los candidatos. "Quedarse en esta actitud conflictual no le hace bien al país", afirmó. En cuanto a los migrantes y los refugiados, reconoció que esta realidad, "gracias a Dios, no nos ha encontrado dormidos", y agradeció profundamente el trabajo en las parroquias, en las que semanalmente ve que "la acogida, la integración y la protección de los migrantes se ha hecho parte viva de nuestra Iglesia". En este aspecto, el arzobispo destacó dos tareas fundamentales para llevar adelante: "Favorecer en toda la comunidad una acogida cordial, incondicional, de humanidad, de fe cristiana hacia los hermanos que vienen en busca de un futuro mejor, y la acogida también en el seno de la comunidad parroquial".
Otra tarea que es importante asumir, expresó el cardenal Ezzati, es la realidad de la droga y la violencia, en el cual la Iglesia tiene mucho que aportar. "Es un tema social que lo tenemos que abordar también en primera persona, y lo que podamos hacer en beneficio de nuestro país en ese campo es fundamental que lo podamos ofrecer".
El sínodo es de todos
Finalmente, se refirió al X Sínodo Arquidiocesano, dedicado a los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional. Al respecto, el pastor enfatizó que "es un sínodo de toda la Iglesia de Santiago. Quisiera, desde lo más profundo de mi aspiración pastoral pedirles que sientan que el sínodo es una inspiración que el Espíritu le hace a la Iglesia de Santiago para enfrenar un desafío fundamental en nuestro ser Iglesia. Sin duda alguna el tema de los jóvenes es necesario que se convierta en una focalización de nuestra misión eclesial". Reiteró el cardenal su petición de que "sientan que el sínodo les pertenece, es tarea de todos nosotros, y ojalá que en las próximas etapas podamos tener una participación y aporte muy significativos, especialmente de todos los consagrados".
Terminada su intervención, tuvo lugar un diálogo con el pastor, en el que los presentes pudieron hacer comentarios y consultas al cardenal Ezzati, centradas básicamente en la próxima visita del Papa.
Jorge Pérez, secretario pastoral de la Zona Sur, precisó que este encuentro de consagrados - presbíteros, diáconos permanentes y religiosas- reúne a ceca de 80 personas y se realiza mensualmente. En este encuentro abordaron, además, la preparación de la Escuela de Verano 2018 y el desarrollo del programa Emaús, dirigido a fortalecer el trabajo de agentes pastorales con muchos años de servicio.