Curso “Cuidado y Esperanza” convocó a un centenar de agentes pastorales de la Zona Norte

La iniciativa, se concretó gracias a un trabajo en conjunto entre el Equipo de Prevención de la Vicaría de la Zona Norte y la Delegación para la Verdad y la Paz del Arzobispado de Santiago.

Para Paulina Pérez, directora del Departamento de Promoción de Ambientes Sanos del Arzobispado de Santiago, la relevancia de esta formación radica en que se favorece el fortalecimiento y la articulación del equipo zonal, como también la comunión eclesial. “Creo que, junto con cumplir con la normativa de nuestra Iglesia en estas materias, logramos avanzar en el compromiso corresponsable de crear ambientes cada vez sanos, en donde no sea posible la generación y mantención de ningún tipo de abuso. Cada uno de nosotros, tiene la misión de anunciar y testimoniar el encuentro con Jesucristo, quien vino a este este mundo a darnos vida en abundancia. En coherencia con ello, debemos desplegar todas las acciones que sean necesarias para que nuestras relaciones estén basadas en el respeto a la dignidad de cada persona, en dónde seamos capaces de cuidarnos y autocuidarnos”.

Carlos Zurita, del equipo de formadores de Prevención de Abusos y Promoción de Ambientes Sanos de la Zona Norte, detalló que la formación es parte fundamental de cualquier agente pastoral y cristiano. "No podemos callar lo que hemos visto y oído. Para anunciar la buena noticia hay que conocer la noticia, una noticia fresca y activa que está en constante movimiento hablando en tantos hermanos, donde reconocemos a Jesús en lo cotidiano”.

Agregó. “Para nosotros como equipo, es de vital importancia que los agentes pastorales puedan formarse en estos temas para generar ambientes donde todos y todas se sientan cómodos, tranquilos y libres, donde se aprenda a tratar con dignidad a cada participante de la comunidad y donde sepamos cómo actuar cuando se ha vulnerado la integridad y esa libertad de cualquier miembro”.

Diego Rojas, encargado de Formación de la zona Norte, añadió que el curso surgió de la necesidad de seguir avanzando en la promoción de ambientes sanos en la zona y fomentar el buen trato dentro de sus comunidades. “La idea con la que queremos que se queden los participantes del curso es que la mejor manera de prevenir malas prácticas es haciendo comunidad, es compartiendo, conociéndonos, haciendo nuestras las alegrías de cada miembro de la comunidad, pero también sus preocupaciones o dolores. Es vivir en el amor de Cristo. Aún falta mucho camino por recorrer”, precisó.

Juany Inostroza, del Departamento de Catequesis y quien participó del curso, agradeció el espacio de formación tan necesario para las personas. “Siempre es bueno ir actualizándose en estos cursos tan valiosos, en términos de vivir en comunidad, pero también dentro del cuidado personal y en nuestra vivencia comunitaria, es decir, cómo vamos mejorando nuestros ambientes mirando a futuro sin pandemia. También es importante saber prevenir frente a los demás, no sólo en aspectos de abuso sexual, sino que en abusos de poder que es algo que pasa en muchas parroquias. Estos cursos ayudan a que todos hagamos iglesia, porque siempre es bueno crecer, volver a mirarnos interiormente y ser otro Cristo para mi hermano”.    

Entre el 6 y 9 de septiembre, el Decanato de Independencia, realizará este mismo curso de formación en su tradicional Escuela de Primavera 2021.