Instituciones católicas enfatizan en los Derechos del Niño

En esta mesa participan la Vicaría de Pastoral Social Caritas del Arzobispado de Santiago, los Hermanos Maristas, la Fundación Hogar de Cristo, los Hermanos De La Salle, la Vicaría para la Educación del Arzobispado de Santiago, la Congregación Salesianos, la Red Educacional Ignaciana, Caritas Chile y Conferencia de Religiosas y Religiosos de Chile, CONFERRE.

El documento "Nuestra Identidad" fue el fruto del trabajo de un año con todas las organizaciones que integran la Mesa BICE Chile, señaló Claudia González, representante de la instancia.  Indicó que en 2009 recibieron el llamado de BICE Internacional para trabajar en la defensa y promoción de los derechos de los niños. "Después de un largo trabajo y planificación, el año pasado consolidamos nuestra tarea y hoy tenemos una visión que nos identifica como una institución que aporta a la defensa y promoción de los derechos de los niños y jóvenes en los diversos ámbitos de la vida eclesial", dijo.

Entre los desafíos de esta filial chilena de BICE figuran trabajar en conjunto las instituciones participantes, descubriendo las riquezas de cada una de ellas; concretar protocolos y manuales que pongan a la niñez en el centro de su quehacer y promover la participación de los jóvenes.

A la presentación de este documento asistieron los obispos auxiliares de Santiago Cristián Roncagliolo y Alberto Lorenzelli, además de los representantes de cada una de las entidades que conforman esta mesa.

En la oportunidad, monseñor Roncagliolo manifestó que "la prevención de los niños hoy sigue siendo una preocupación importante para la sociedad contemporánea y para la Iglesia, particularmente en nuestro país". Añadió que "las personas culpables de abusos o delitos contra los niños se encuentran entre los miembros de las profesiones más respetadas y prominentes del mundo y, desafortunadamente, también en el clero y en algún personal de la Iglesia. Esto es particularmente grave, ya que estas personas que ocuparon puestos de gran confianza y estuvieron llamadas a promover y proteger en todos los aspectos a la persona humana, incluida su salud física y espiritual, han traicionado esa confianza".

Por último, el obispo expresó que "esta relación de confianza es justamente la que tenemos que construir y requiere el mayor esfuerzo y responsabilidad de todos nosotros". Agradeció el aporte de las instituciones que integran esta mesa; enfatizó que "nuestra sociedad y nuestra cultura requieren poner la protección de los niños en el centro", y señaló su deseo de que, renovada la confianza, los niños encuentren en las instituciones de la Iglesia "su casa y un lugar donde ellos puedan crecer protegidos, cuidados y crecer en la fe y en el amor".

Una de los participantes en esta mesa es la abogada Andrea Idalsoaga, delegada episcopal para la Verdad y la Paz, quien indicó que en esta delegación, donde están promoviendo ambientes sanos y seguros, ha habido un trabajo comprometido. "Lo que más nos gusta de esta mesa es que establece ciertos conceptos que son muy buenos, como la participación de los jóvenes", expresó. Y añadió: "Yo creo que para tomar ciertas medidas que favorezcan crear ambientes sanos, tenemos que escuchar a nuestros jóvenes y niños. Estamos en un tiempo de crisis en el que tenemos que mantenernos siempre muy unidos, para que nuestros niños, la persona, la dignidad humana, como hijos de Dios, sean el foco de toda la sociedad".

En el encuentro se anunció una jornada de jóvenes, que se desarrollará el 27 y 28 de noviembre de este año en la casa de ejercicios Loyola, de Padre Hurtado. Yolanda Urbina, de la Vicaría Pastoral Social Caritas, dijo que el objetivo de esta jornada será promover la participación de los jóvenes y "generar un compromiso en torno a los derechos de los niños en cada una de estas instituciones en sus distintos niveles".