Diáconos reflexionaron cómo unir sus vidas con la Palabra de Dios

La  actividad fue abierta por el obispo Alberto Lorenzelli, quien dio la bienvenida a los diáconos permanentes y sus esposas y presentó al expositor, el obispo Santiago Silva Retalames, biblista, presidente de la Conferencia Episcopal de Chile, quien destacó que justo este miércoles se celebró el día de san Jerónimo, que comenzó la traducción latina de la Biblia y escribió muchas obras sobre la Sagrada Escritura.

Santiago Silva se refirió a diversos temas para ayudar a descubrir desde la naturaleza de Escritura qué es la Animación Bíblica de la Pastoral (ABP) para la vida de la Iglesia y la vida de los diáconos permanentes. En su intervención señala que el ser humano, como ser racional en diálogo, “está en nuestra naturaleza” para salir al encuentro del otro. “La Biblia es esencialmente un medio de comunicación” a través del cual Dios sale a nuestro encuentro, expresa.

Agrega que la Sagrada Escritura es Palabra de Dios y actúa en el creyente; es inspirada por el Espíritu Santo para nuestra salvación y en la pastoral de la Iglesia “es fuente de evangelización”, la savia del árbol. Respecto de la ABP, monseñor Silva indica que tiene en su centro a Cristo Jesús, el Señor. Y destacó las tres dimensiones de la ABP: conocimiento, comunión y evangelización, todas nutridas de la Sagrada Escritura. Después abordó las funciones de la Palabra, las lecturas apropiadas de la Sagrada Escritura y la pastoral bíblica en los documentos de la Iglesia.

También expuso sobre el ministerio del diácono y el servicio de la Palabra en un cambio de época, “porque la Sagrada Escritura tiene que ser leída en los tiempos en que nos encontramos, no leída atemporalmente”. Afirma que el diácono tiene que ser un servidor de la verdad, con convicción, enseñar a leer, escuchar y practicar la Palabra de Dios y alimentar con ella su vida cotidiana y su familia, como una Iglesia doméstica.

Luego, el presidente del episcopado chileno invitó a los diáconos y sus esposas a hacer un examen de conciencia acerca de su relación con la Sagrada Escritura, la que debe estar presente en todas las pastorales. Para finalizar, hubo un diálogo con los participantes, en el que hicieron consultas al obispo y conversaron sobre la interpretación de la Biblia, la evangelización y otros aspectos.

Al término del encuentro, monseñor Alberto Lorenzelli agradeció al expositor y a los participantes y señaló que en este tiempo de pandemia y el que le sigue “se nos pide una conversión pastoral”, que se realiza a través de la Palabra de Dios, la que, expresó, “debe ser parte de nuestra vida para ser evangelizados y evangelizadores”.