Invitados a escuchar a los jóvenes

Con una eucaristía presidida por el arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, la Iglesia de Santiago despidió al padre Francisco Llanca, quien durante varios años estuvo a cargo de la Vicaría de la Esperanza Joven, y dio la bienvenida a Monseñor Cristián Roncagliolo, quien asumió como nuevo vicario.

Fotos: Héctor Landskron

En su homilía, el arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati se refirió a los cinco desafíos de la vicaría: Realización del X Sínodo, cuyo lema es “Jóvenes, fe y vocación sacerdotal”, ser una Iglesia misionera, que cada fragmento esté en la totalidad del anuncio cristiano, fortaleces el camino cristiano a través de la eucaristía y, finalmente, pasar del conocimiento de la vida de Jesús en los sacramentos, a la vida del mundo.

El pastor, agregó: “Necesitamos lograr ayudar a que la pastoral juvenil, que está en la escencia de la vida cristiana, esté presente en la vida de hermanos que necesiten testimonios”.

Al despedirse el padre Francisco Llanca expresó: “Quiero darle las gracias a dios por todo este tiempo, por la confianza de esta hermosa labor, encomendándome a los jóvenes. También agradecer a la gran cantidad de hombres y mujeres que quieren ser testigos que quieren ser testigos de Jesús, tarea que creciendo juntos, será má fácil y sencilla”.

Por su parte, el nuevo vicarío señaló: “Creo que tenemos un gran desafío, una tarea grande, preciosa, desafiante, pero, por sobre todo, es la tarea de Dios sobre nosotros. Nosotros somos testigos de cristo, no somos cristo, somos portadores del señor. Y por lo tanto este desafío de esperanza yo lo asumo con una fe absoluta, y una fe en el Señor”.

Tras la eucaristía, la comisión a cargo del Sínodo, se reunió para trabajar en su planificación y en las distintas iniciativas que se realizarán en su etapa previa.