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Viernes 3 de septiembre de 2021

Equipo de Servicio de la VEJ celebra 30 años de amor a la Iglesia

Los 30 años fueron festejados en una gran actividad virtual el sábado 28 de agosto, donde 120 servidores de distintas generaciones, compartieron un espacio de oración, acogida y de memoria agradecida hacia el Señor por estas tres décadas.

Periodista: Enrique Astudillo Baeza

Fuente: Iglesia de Santiago

Link fuente: www.iglesiadesantiago.cl

La jornada, que se enmarcó dentro de las actividades del Mes de la Solidaridad que organizó la Vicaría de la Esperanza Joven durante agosto, y estuvo acompañada por momentos de música y reflexión.

Monseñor Cristián Roncagliolo, vicario del VEJ, recordó que para el cristiano el amor es entrega y es la donación de la vida al modo de Jesús, hasta el precio de sí. “El trabajo arduo de servicio tiene como fundamento el amor de Cristo y quiere ser el espejo del amor de Cristo, que es un amor entregado por los demás. Por eso, el amor entregado es igual: servicio. Y eso es lo que para nosotros es nuestro equipo, el Equipo de Servicio en estos 30 años: un camino para amar y servir hasta el precio de sí, con entrega generosa, con donación de la vida, con esfuerzo permanente, con la comprensión de que somos un pilar fundamental para que otros puedan participar más y mejor en la vida de fe”.

Luego, precisó que “el que se entrega, el que se da, crece. Crece en el corazón, crece en el amor, crece en la amistad con Jesús y eso se nota en la vida del que lo ha vivido. Por eso es que el que estuvo en el Equipo de Servicio siente una pertenencia creciente y progresiva en la fe y la Iglesia, porque ese amor va quedándose en el corazón. Lo damos, pero también va transformando el propio corazón y le va dando un nuevo horizonte y una nueva pertenencia”.

Por último, agradeció a todos los servidores y los animó en la fe, “acordándose que cuando estén levantando una carpa, cuidando un camino, ayudando a dar agua o lo que les toque, es Cristo el que está sirviendo a otro Cristo. Eso es lo que nos toca el corazón y en esa entrega nos llenamos de felicidad. Ánimo, confianza en Dios y no olvidarnos que Dios está haciendo grandes cosas en nosotros”, dijo.

Gracias por todos estos años

Con el paso de la actividad, vino un espacio para agradecer a uno de los servidores activos con más tiempo dentro del Equipo de Servicio, Francisco Baez, quien manifestó su alegría por la experiencia de ser servidor: “Yo tengo tres reglas de oro y una de ellas es que para mí ayudar no es una opción, es una obligación, porque me siento bendecido de vuelta. Yo creo que la vida es cíclica, por tanto, intento ayudar en lo que más puedo, en todo momento y pensar en servir como una forma de vida. Siento que para mí el servir es ver a Cristo en otro y en base a eso tienes a Cristo en todos lados. Su presencia está en todo el mundo, en toda persona”.

Francisco Baez, también sostuvo que es una responsabilidad tener el peto y es importante que cada uno considere que lo que estás mostrando “es la cara de un Dios que está ahí para apoyar y apañar a quien está al lado” y enfatizó que “es ver a Cristo en la abuelita que puedes ayudar, a la persona que está perdida, a quien necesita un vaso de agua (..) está en toda persona. Siento que en base a eso mi forma de servir ha sido súper satisfactoria, porque yo veo a Cristo en todos lados y ha generado en mí que no rezo en un momento, yo no estoy en un momento en oración y solamente ahora es estar rezando, estar con Dios. Es estar con Dios en todo momento”, detalló.

Luego, Mavy Berger, parte de las servidoras con más tiempo en la VEJ, detalló que haber pertenecido al equipo de servicio fue una vuelta de mano. “Yo participé primero como voluntaria en una JMJ y justamente participé como voluntaria porque había ido a una JMJ como peregrino. Entonces, fue tanto lo que yo recibí en esa JMJ que yo dije tengo que dar esa vuelta de mano y fui como voluntaria a Río y me quedó gustando esto de servir de manera desinteresada, como hormiguita muchas veces haciendo la pega que nadie ve, pero que es súper necesaria”.

Mavy Berger señaló a los asistentes que, quien es servidor, es servidor todo el tiempo, no solamente cuando tiene el peto puesto. “Si uno tuviera que hablar solamente del equipo de servicio, estaríamos yo creo que tres días aquí contando anécdotas y experiencias varias. Obviamente hay de todo. Hay momentos en los que uno se enoja y rabea y nada funciona y todo, pero raya para la suma, uno siempre queda con ese cansancio rico, con esa sensación de corazón llenito, que es lo que más importa. Es una familia en la que uno se siente acogido, acompañado”.

Memoria agradecida

Cerró la actividad virtual por los 30 años del Equipo de Servicio de la Vicaría de la Esperanza Joven, una recopilación de videos testimoniales con diversos servidores, que han sido parte de estas tres décadas.