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Artículo

Martes 13 de octubre de 2020

El deber del cristiano de participar desde su fe en la vida de la sociedad

Este fue el tema central del Tercer Encuentro de Formación del Equipo de Servicio de la VEJ sobre Participación Ciudadana, presidido por el vicario, padre Cristián Roncagliolo, a través de teleconferencia.

Periodista: José Francisco Contreras

Fuente: Iglesia de Santiago

Link fuente: www.iglesiadesantiago.cl

En la actividad participaron más de 30 miembros del Equipo de Servicio, su Asesor Arquidiocesano, padre Manuel Reyes y los coordinadores Christian Peters y Marisol Sánchez. La exposición central estuvo a cargo de Francisca Palacios, trabajadora social, magíster en "Intervención Social con mención en familias", fundadora de Fundación Fe y Ciudadanía y encargada pastoral del Instituto Comercial Blas Cañas.

El Vicario de la VEJ, padre Cristián Roncagliolo en su oración inicial, pidió a la Virgen María que “nos regale un corazón noble, nuevo, bueno, alegre, entusiasta para poder seguir sirviendo y poder seguir creciendo en la fe, la fe que renueva el corazón y cambia la vida”.

Francisca Palacios, quien trabajó en las Vicaría para la Educación y VEJ, inició su intervención con un trabajo interactivo, consistente en expresar ideas espontáneas respecto de qué significa, según cada uno, el concepto “participación social”. En esta actividad, los integrantes del Equipo de Servicio marcaron ideas como participar con más personas, conocimiento de los procesos sociales, dar una opinión informada, respetar la opinión del otro y tomar decisiones.

Luego, planteó tres definiciones académicas sobre participación social y promovió un diálogo con los presentes sobre este fenómeno, que ha sido materia de estudio por muchos años en la sociedad, dijo, y en el que prevalece la idea de que hay que ser partícipe de algo, sin que quede muy definido si se trata de participación social, ciudadana o política, pero sí ser parte de algo, que es el significado etimológico del término.

Otro trabajo que se desarrolló en pequeños grupos, fue indicar ámbitos en los que los jóvenes participan hoy. Entre las respuestas más mencionadas, figuran las pastorales, el voluntariado, los centros de alumnos, las manifestaciones, los deportes, los sindicatos, las parroquias, la sede vecinal con las ollas comunes, los colegios, el barrio y las misiones. De vuelta en la asamblea, la expositora destacó los espacios pastorales, las expresiones políticas y la ciudad.

Hablar desde el Evangelio de Jesús

Terminando este trabajo, los agentes del Equipo de Servicio respondieron la pregunta si el cristiano está llamado participar, oportunidad en que se dieron varias respuestas, siempre positivas, como la de Valentina Urra del Equipo de Servicio de la Zona Oriente, quien señala que “sí, tenemos que ser los primeros en estar siguiendo el ejemplo de Jesús y generar un espacio de amor”. Por otra parte, Bárbara Salas del Equipo de Servicio de la Zona Oeste, dice: “Sí, hay que participar. En las movilizaciones surgió la preocupación por el otro, salir de la individualidad. También en la pandemia surgieron las ollas comunes, y está el ejemplo del padre Alberto Hurtado”. Andrés Oviedo del Equipo de Servicio de la Zona Cordillera, indica que “los jóvenes cristianos participamos en muchas experiencias pastorales o sociales, pero nos cuesta hablar desde el Evangelio o desde Jesús, siempre hablamos muy bonito de lo social, pero no de Jesús”.

Después de escuchar estas opiniones, Francisca Palacios resaltó diversos fundamentos evangélicos, del Magisterio de la Iglesia y del Papa para promover la participación de los cristianos en la vida de la sociedad. Una última instancia de conversación giró en torno a la pregunta qué es participación social cristiana, entre cuyas respuestas figuran: estar informados, buscar el bien común, dar testimonio, escuchar, basarse en el Evangelio, tener valentía para denunciar las injusticias y hacerse responsable del Pueblo de Dios. La expositora terminó su intervención animando a los miembros del Equipo de Servicio de la VEJ a que nadie se reste de la participación.