Seminario Pontificio celebra Fiesta Patronal junto a sacerdotes y seminaristas

La intensa mañana, comenzó entre otras cosas, con las palabras del Rector del Seminario Pontificio Mayor, padre Cristian Castro, quien dio paso a un trabajo grupal entre sacerdotes, formadores y seminaristas, los cuales profundizaron las palabras del Papa Francisco en su paso por Chile y también, para conversar sobre la actualidad que vive la Iglesia chilena.

"Convocamos especialmente a quienes se han formado en nuestro seminario a lo largo de su historia. Son 434 años los que estamos cumpliendo, así que hay toda una tradición hermosa y recibir a los hermanos sacerdotes, poder compartir con ellos es maravilloso. Cada uno de ellos recuerda su paso por acá con mucho afecto", señaló el padre Cristian Castro, Rector del Seminario Pontificio Mayor.

La eucaristía, presidida por el Arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, estuvo marcada por el recuerdo del inmenso trabajo de vocación que el Seminario Pontificio ha realizado en tantos sacerdotes y en la actualidad, en sus seminaristas: "El seminario es un espacio sin igual de escucha. Sí, porque esa actitud de escucha es una de las actitudes fundamentales que todo bautizado está llamado a desarrollar en nuestra existencia, y que de una manera muy particular, toca la vida de los hermanos consagrados y del Orden".

Añadió: "Es también una escuela para dar respuestas. Como en nuestro bautismo, la llamada de Dios es a pertenecer al cuerpo de Cristo hasta la madurez de la fe, así también, el seminario es escuela de escucha. El seminario es una escuela de formación y aprendizaje, donde constantemente aprendemos a tener el oído atento a la Palabra del Señor y que nos invita a dar respuesta cada vez más profundas frente al discernimiento".

Por último, exhortó: "El seminario debe ser una escuela que vaya al encuentro, que sea un ministerio en salida como nos invita muchas veces el Papa Francisco, que vaya a las periferias, a las nuevas periferias que la ciudad nos presenta".

A la celebración, asistieron vicarios zonales y ambientales de la Arquidiócesis de Santiago, además de sacerdotes de otras Diócesis de Chile, todos, quienes tras la misa, compartieron junto a los seminaristas un almuerzo fraternal para seguir con una tarde recreativa y de festejos.