Miércoles 10 de octubre de 2018
Colegios compartieron experiencias de aprendizaje colaborativo
El seminario contó con la participación del profesor español Ángel Serrano, conocido por haber implementado un proyecto de aprendizaje colaborativo como herramienta de innovación educativa.
Fotos: Nibaldo Pérez
Periodista: Marcela Maldonado
Ángel Serrano, director del Colegio Padre Piquer de Madrid, compartió su experiencia de implementación del aprendizaje colaborativo en las salas de clases, como herramienta de innovación educativa e inclusión de los alumnos.
Instalado en un contexto vulnerable, con alumnos de distintas culturas y credos religiosos y con diferentes capacidades y formas de aprender, el Colegio Padre Piquer aspiraba a ser un espacio inclusivo con igualdad de oportunidades para todos los niños.
Así diseñaron un proyecto que ponía al centro a los alumnos. Modificaron el espacio de las aulas, tuvieron más profesores en la sala trabajando juntos y siendo facilitadores. Se plantearon el aprendizaje cooperativo con multitareas y uso de las nuevas tecnologías; además unieron las materias por ámbitos y unidades de aprendizaje.
"Para nosotros era importante llegar a todos y cada uno de los niños y que fueran capaces de trabajar juntos. Para hacer esta innovación, es fundamental que exista liderazgo, no se puede generar cambios de estructura por mandato", señaló el expositor.
En el seminario se presentaron experiencias de este tipo desarrolladas en colegios de Santiago.
Si bien desde 2016 el Colegio Simón Bolívar tenía aulas colaborativas, faltaba algo que generara un cambio mayor. La innovación que buscaba la comunidad vino de la mano del Diplomado Escuelas de Aprendizaje Colaborativo, de la Vicaría de la Educación, que ya ha capacitado a 260 docentes.
Marisol Bravo, directora del colegio Simón Bolívar, comentó sobre la innovación que han hecho a través de "el aprendizaje basado en proyecto y el modelo steam que es interdisciplinario y persigue la integración de las materias científicas, técnicas y artísticas. Las disciplinas de steam son ciencia, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas y generan un aprendizaje creativo e integrado".
Los aportes de todo esto, asegura Marisol, son "la mejora del rendimiento académico, la asistencia de los estudiantes, así como su interés y motivación, entre otros".
Luego de una reflexión pedagógica interna sobre cómo atender la heterogeneidad de los alumnos en el aula, el equipo del colegio San Nicolás Diácono hizo un cambio radical.
Su directora, Mónica Indo y 9 profesores fueron parte del diplomado de la vicaría y allí encontraron respuesta a sus inquietudes. "Nos pegamos el salto", dice Mónica. "Hicimos una intervención radical de las asignaturas madres en séptimo básico, generamos dos ámbitos, uno que une sociedad, lenguaje e inglés y otro que asocia matemáticas, ciencias naturales y tecnología, por lo tanto los niños tienen cuatro mañanas por ámbito, con harto trabajo grupal y dos profesores trabajan por aula". Los resultados de esta experiencia que ya lleva ocho meses hablan de niños con procesos de motivación muy potentes, tienen más participación y acción en la medida de sus posibilidades y desarrollan la creatividad, entre otros aspectos.