Tras ataques a la parroquia “La Asunción” decenas de personas acompañaron a la comunidad

En la parroquia se reunieron decenas de personas de distintos sectores de Santiago y miembros de la propia comunidad que ayudaron en las tareas de limpieza y orden tras lo ocurrido la tarde de este viernes 8 de noviembre, en el contexto de las movilizaciones producto del estallido social.

El padre Pedro Narbona, párroco de la comunidad, agradeció el apoyo que les han manifestado en estas horas: "Eso es lo hermoso, lo gozoso y lo que da esperanza. Muchos hermanos desde ayer en la tarde se empezaron a conectar, me llamaban por teléfono, gente de la comunidad e incluso personas que ni conocía, se despertó una corriente de vida solidaria, de preocupación, de oración, de venir hoy día, de traer materiales y dejar horas de hacer sus cosas personales para ayudarnos a sacar todo lo sucio. Eso lo hemos podido hacer gracias a ellos y la comunidad, que hoy y anoche han estado".

Si bien el padre Narbona manifestó su dolor ante los hechos, afirmó que: "La Iglesia más allá de lo material que se cae y se puede caer ciertamente, se construye con piedras vivas, que son quienes vinieron a ayudar. Aunque quede un solo cristiano católico apostólico romano que viva coherentemente su fe y su amor a Jesucristo, va a existir la Iglesia católica, porque la Iglesia es más que las tablas".

Monseñor Celestino Aós, Administrador Apostólico de Santiago, envió un video a toda la comunidad lamentando y rechazando lo sucedido en la parroquia: "Con toda la fuerza de nuestra voz, pedimos a todos nuestros hermanos, compatriotas, que cese toda violencia. Que quienes engañan considerando la aparente eficacia y triunfo de la violencia, pasen al camino del diálogo y la búsqueda de soluciones a los problemas, aportando sus propias visiones".

Entre las personas que estuvieron ayudando durante esta mañana, estaba Hortencia Cereceda, miembro de la comunidad y vecina de la parroquia desde hace 20 años, quien sostuvo: "Lo de ayer lo presenciamos con mucho dolor. Intentamos dialogar con las personas que vinieron a saquear, pero no fue posible. Ahora queremos ser un aporte para limpiar y que esta parroquia vuelva a ser un lugar de encuentro. La Iglesia no son las paredes, somos todas las personas que queremos un cambio. Tenemos que volver a encontrarnos, tenemos que entender que la violencia no es la forma para solucionar. Yo estoy por reconstruir un concepto de país unido y en paz", manifestó.

Francisca Tagle también vino a ayudar, pero desde una comuna lejana, ella es trabajadora de una institución de Iglesia y sus abuelos fueron parte de la comunidad de la parroquia La Asunción: "Estoy aquí por mi fe, por ayudar a construir la iglesia que más que objetos, son las personas. Es totalmente esperanzador ver como todos motivados por su fe y por restituir la palabra de Dios, estamos aquí reconstruyendo el templo", afirmó.

Monseñor Aós, también entregó un mensaje a la comunidad de La Asunción: "A ustedes querido padre párroco y feligreses de la parroquia nuestra cercanía y solidaridad en su dolor. A todos ustedes estimados hermanos en la fe, les repito con el apóstol. No se dejen vencer por el mal, sino venzan al mal con el bien. Es la hora de acudir con la Virgen María y renovar nuestro compromiso de ser instrumentos de paz".