La vigilia en la espera de Pentecostés

En su homilía el Arzobispo de Santiago señaló a los feligreses: "La Iglesia, en esta noche, se encuentra reunida, como lo hicieran los apóstoles y la Virgen María en la espera del Espíritu Santo, orando e invocando la venida del Espíritu para que acompañe el caminar de todos nosotros a fin de que seamos fieles a Jesucristo y para que nuestro testimonio en el mundo sea un testimonio que convenza".

Profundizó, además, en la lectura de los Héchos de los Apóstoles que señala: «Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en un mismo lugar. De repente vino del cielo un ruido como el de una ráfaga de viento impetuoso, que llenó toda la casa en la que se encontraban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos; quedaron todos llenos del Espíritu Santo y se pusieron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse».

Frente a esto, recordó la historia de la ciudad de Babel: "Estaban tratando de construir en la ciudad una torre alta que llegara hasta el cielo y ahí, pobre humanidad, en lugar de construir comenzaron a destruir, se confundió su lengua, no se entendieron más y en lugar de construir una ciudad hermosa de fraternidad y paz, comenzaron a construirse en el odio, en la división, en el rencor".

Finalizó invitándolos a abrir el corazón para recibir al Espíritu Santo: "Ven Espíritu Santo a nuestro corazón, tú que ya viniste a nuestro corazón el día de nuestro bautismo y que hiciste de nuestro cuerpo un templo donde tú recibes, permítenos que ese templo sea un templo santo, puro, de la verdad, donde siempre podamos acogerte. Ven Espíritu Santo, haz que desaparezcan todas las divisiones".

Luego, el párroco Juan Manuel Sayago, dijo: "Hoy queremos tener un momento de adoración para ser fieles a lo que el Señor ha puesto en nuestro corazón: buscar al Señor en su presencia y en su palabra".

Al término de la Eucaristía, la comunidad arrodillada, oró frente al Santísimo y luego realizó una procesión hacia el patio de la parroquia para continuar con la espera de Pentecostés.

El mensaje del Papa Francisco

En tanto, el Papa Francisco, celebró la Solemnidad de Pentecostés en la Plaza de San Pedro en Roma, donde señaló a los feligreses: "El mismo Espíritu crea la diversidad y la unidad, y de esta manera plasma un pueblo nuevo, variado y unido: la Iglesia universal".

Además, les dijo: "Este es el comienzo de la Iglesia, este es el aglutinante que nos mantiene unidos, el cemento que une los ladrillos de la casa: el perdón".