Con María Auxiliadora “Somos familia”

En las afueras del Liceo José Miguel Infante, de las Hijas de María Auxiliadora, ubicado en General Mackenna con calle Brasil, se congregaron centenares de personas para peregrinar junto a la imagen de la Auxiliadora hasta el Santuario de la Gratitud Nacional en Avenida Ricardo Cumming con Alameda.

El Arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati encabezó la peregrinación, la que sin lugar a dudas fue protagonizada por las comunidades de los colegios salesianos de la Región Metropolitana que con su alegría, fe y entusiasmo acompañaron el recorrido de la virgen por las calles de Santiago.

Antes de dar comienzo a la caminata, el pastor de la Iglesia de Santiago, señaló cuál era el deseo de esta celebración; “Que sea una expresión de fe, de amor. Que sintamos que en nuestro caminar, siempre el Señor nos acompañe con la materna protección de su madre, la Virgen María. Que esta procesión sea un signo de lo que sucede en nuestra vida caminando junto a nuestra Madre Auxiliadora”.

Durante la procesión hubo tres estaciones en las que se entregaron mensajes de la misericordia y piedad de María Auxiliadora junto con dar lectura del mensaje del Apóstol Juan en el libro de Apocalipsis.

 “Venimos de Maipú junto a toda nuestra familia a esta gran celebración. Nos parece espectacular la integración de la iglesia con los jóvenes, los alumnos y los apoderados de la familia salesiana. Es una actividad muy bonita para el fin de semana”, comentó alegre Manuel Escobar, apoderado del Colegio Salesianos Alameda.  

Por su parte otra fiel, Maribel Tolosa, dijo sentirte “feliz de que la iglesia nos regale estos momentos, es algo muy bonito y muy sano, vale la pena hacer una pausa junto a la familia y dedicarle una tarde a nuestra virgen, así los jóvenes se sienten más cercanos a ella y a la iglesia”.

La peregrinación concluyó con una eucaristía desbarbada de fieles, en el templo de la Gratitud Nacional. “Para que junto con ella podamos trabajar para construir respeto, amistad cívica entre todos los habitantes de Chile. Que María multiplique por miles el milagro de Canaán de Galilea, que ella vaya cambiando el agua insalubre en un vino nuevo de caridad para que de verdad nuestro Santiago se vaya construyendo como una comunidad de hermanos, donde los niños puedan crecer en los valores del evangelio, en un ambiente de paz, que se eduquen cristianamente y que en cada hogar puedan encontrar el cariño de una familia que los acoja y los vea crecer”, dijo el Arzobispo de Santiago en su homilía.

Además agregó: “San Juan Evangelista en el libro de apocalipsis presenta una imagen que habla del lucha, que habla de un enemigo pero que habla sobre todo de un vencedor. El enemigo es el demonio, lo sabemos muy bien, el mal que asecha constantemente nuestra vida pero María nos muestra quien es el vencedor del mal y de la serpiente, que quiere engañarnos y apartar el camino de Dios. En esta lucha hay un vencedor que le gana al mal de forma definitiva y que lo seguirá derrotando también en la lucha de cada cristiano y de la comunidad entera. Ese vencedor es el hijo de María, aquel que es hijo del padre Dios, pero que el padre quiso que se hiciera hombre en el seno de María para compartir nuestra naturaleza humana y para reconciliarnos”. 

Tras la eucaristía se dio término a la fiesta de María Auxiliadora, con un compartir fraterno en el gimnasio del colegio donde los asistentes pudieron disfrutar de diferentes expresiones artísticas protagonizadas por los propios alumnos del Colegio Salesianos Alameda.