Culminó la Jornada de Discernimiento y Planificación Pastoral de la Arquidiócesis

En medio de la actual crisis que vive la Iglesia de Santiago, obispos, vicarios, encargados de áreas, laicos, diáconos y consagrados, se reunieron para discernir y plantear propuestas concretas sobre el camino en el que se fundará el trabajo pastoral  de la Igleisa de Santiago para el año que viene. 

"En el doloroso momento que vivimos, este encuentro toma una importancia radical, porque se trata de enfrentar una situación difícil de crisis de la Iglesia, donde debemos enfrentar desafíos nuevos con gran valentía", comento el Vicario Episcopal para la Pastoral, Pbro. Héctor Gallardo, a cargo de la jornada.

Bajo esa premisa, la primera línea de acción propuesta apuntó a ser una Iglesia Samaritana, capaz de poner como principal preocupación a las víctimas de abusos por parte de clérigos, a través de la acogida, escucha, reparación y justicia.

"Un abuso no es abuso, no es crimen porque se descubre sino porque se ha realizado. Si este momento para todos nosotros es un momento de confusión, vergüenza, de dolor es porque lastimosamente hechos de esta naturaleza han acontecido en la historia de nuestra Iglesia y de la Iglesia de Chile. Ese es el pecado, y el pecado es también que si habiendo conocido situaciones que se dieron, lo hubiéramos ocultado", expresó el Arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati al culminar el encuentro.

Tema que fue abordado como prioritario en las mesas de trabajo, en las que se plantearon iniciativas claras y concretas para orientar el futuro trabajo de la arquidiócesis.

"La mayoría de los participantes compartían que nuestro desafío en el corto y mediano plazo es comenzar a romper aquellas prácticas y formas que han permitido que se generen situaciones de abuso, no sólo sexual, sino también de poder y de conciencia. Los grupos levantaron con fuerza la necesidad de iniciar un proceso de reconocimiento y reparación a las víctimas de abuso de sexual", comentó Luis Berríos Secretario Ejecutivo Vicaría Pastoral Social, a cargo de guiar a parte de los grupos de trabajo.

La segunda línea de acción propuesta fue renovar la conciencia de ser Pueblo de Dios, con el objetivo de recuperar el sentido y la conciencia de ser Pueblo de Dios misionero y misericordioso centrado en Cristo. A ello se sumó la necesidad de fortalecer la vida comunitaria; renovar nuestra opción por los pobres, con los rostros concretos de hoy, y comenzar la implementación de las propuestas del X Sínodo.

Es preciso nacer de nuevo

En su reflexión final, el Arzobispo de Santiago, volvió a reforzar la idea de que es preciso nacer de nuevo, como lo expresaba San Juan en su Evangelio: "El llamado a la Iglesia de Santiago, es que en medio de las situaciones críticas que hemos reconocido, no solamente como un pecado delante de Dios, sino que muchas veces como un crimen frente a la sociedad, de verdad necesitamos acoger esta invitación evangélica, fijando nuestra mirada en el Señor y en la responsabilidad y corresponsabilidad que cada uno de nosotros tiene como miembro de la Iglesia".

Las propuestas nacidas del encuentro serán sistematizadas en un documento, a fin de integrarlas a la planificación pastoral del próximo año. Posteriormente, serán dadas a conocer en la Jornada de Inicio de Año Pastoral, a realizarse en marzo de 2019, en la que participarán agentes pastorales, laicos y consagrados.