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Jueves 3 de mayo de 2018

Iglesia realiza cumbre sobre migración en Santiago

Nuestra capital será la sede donde obispos, laicos, religiosas y sacerdotes latinoamericanos y caribeños se reunirán en mayo para discutir sobre la dispar realidad migrante en América. Cita que coincide con la presentación del Gobierno de nuevas medidas que regulan el ingreso de extranjeros.

Fotos: Nibaldo Pérez

Periodista: Natalia Castro y Lorena Martino

Fuente: Periódico Encuentro

Link fuente: http://www.periodicoencuentro.cl/mayo2018

Entre el 7 y 9 de mayo se realizará la segunda asamblea de la Red Clamor latinoamericana y caribeña de Pastoral de Movilidad Humana que convoca el Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), para discutir sobre la situación migratoria que de diversas maneras impacta a toda la región, y el mundo entero.

La Red Clamor surge como respuesta a las necesidades de las personas que por distintos motivos se ven en la obligación de migrar. Su objetivo se centra en integrar y articular carismas, recursos y experiencias de instituciones eclesiales comprometidas en el acompañamiento y servicio a migrantes, refugiados, desplazados y víctimas de tráfico y trata de personas.

El trabajo de la red se desarrolla en base a cuatro principios fundamentales: la acogida, protección y promoción de la dignidad de quienes migran y su integración e inserción en las comunidades y países donde se desplazan.

Para el padre Lauro Bocci, vicepresidente ejecutivo del Instituto Católico Chileno de Migración (Incami), es necesario el encuentro para ver cómo, en línea, abordan la temática en los países convocados: "Aquí también analizaremos la migración de Estados Unidos, porque a partir del momento que Trump entra en el gobierno como presidente, él empieza a cerrar las fronteras y eso tiene consecuencias serias para nuestro país, porque muchos venezolanos, haitianos y principalmente cubanos, ahora viajan a Chile. Entonces tendremos la mirada de América Latina y Chile, la política migratoria de Estados Unidos y los pactos globales con relación a migración y refugio en las temáticas de los Derechos Humanos".

Además, para los días 10 y 11 de mayo está programada la celebración de las "XX Jornadas Migratorias INCAMI 2018". A los participantes se suman representantes de gobiernos, embajadas, consulados y universidades. En esta oportunidad, el encuentro se organizará bajo el lema "Un Nuevo Chile", basándose en la comprensión de un país que está en construcción y en el cual las personas migrantes son también agentes transformadores que se suman para enriquecer su cultura y el país mismo.

El objetivo es contribuir con insumos al debate nacional en torno al actual proyecto de Ley de Extranjería y Migración, presentado recientemente al Congreso. Para ello, se elaborará un documento-memoria que se constituya en insumo y contribución del Incami en aportes al diseño, contenidos y mejoramiento del actual Proyecto para la Ley sobre Migraciones y una reflexión para el Gobierno, la sociedad civil, la academia, las organizaciones que trabajan con migrantes, las organizaciones de migrantes que permita actualizar la situación en la cual se considera y debate la actualidad migratoria en el país. Los obispos convocados son de Guatemala, México, Ecuador, Honduras, República Dominicana, Venezuela y los obispos chilenos monseñor Pedro Ossandón y monseñor Galo Fernández.

LAS NUEVAS REGULACIONES

El Presidente de la República, Sebastián Piñera, anunció el pasado 9 de abril una serie de medidas que buscan nuevas regulaciones en el ingreso de migrantes al país. Las modificaciones tienden a acoger y dar un trato justo y humano a los migrantes regulares y a los perseguidos que lleguen a Chile en forma legal, según ha dicho el propio mandatario.

Entre los principales puntos para de esta regulación están la creación de dos nuevas instituciones: el Consejo de Política Migratoria (CPM) y el Servicio Nacional de Migraciones (SNM); un sistema flexible de categorías migratorias; se establecerán requisitos de ingreso claros y un procedimiento administrativo; descriminalizar la residencia irregular y eliminar las sanciones penales para las infracciones migratorias y un proceso gradual de regularización extraordinario para aquellos extranjeros que permanecen en el país en situación irregular y que hayan ingresado a Chile antes del 8 de abril de este año.

IGLESIA PIDE ACOGER, PROTEGER, PROMOVER E INTEGRAR

Monseñor Galo Fernández expresa que "la Iglesia ha estado planteando la urgencia con que se cree un nuevo marco regulatorio para las migraciones, dado que estamos en un sistema muy precario e incompleto, es una ley que data del año 1975 y que mira la migración desde la seguridad del Estado, es decir, casi como una amenaza, y que, por lo mismo, otorga muchas facultades discrecionales al Estado. Además, no vela por la adecuada integración de los migrantes a la sociedad".

El obispo reconoce que "es cierto que ha sido una migración muy acelerada, y eso ha planteado la novedad en el país, ha sido una migración que ha despertado algunos sentimientos que me duelen: clasistas y xenófobos, particularmente con la migración haitiana. Me inquieta la demora y lamento que sea con ese sentimiento presente que se discuta el proyecto de ley. Yo creo que esta nueva ley es una gran deuda".

Sin embargo, valora que se cree un nuevo proyecto de ley: "Me alegra el esfuerzo por ordenar el proceso, valoramos, sobre todo y fundamentalmente, que reconoce el derecho a la migración, la ve como una oportunidad positiva para el país. Ahora se le da la oportunidad al migrante, desde un comienzo, que pueda manifestar su intención de llegar al país a buscar trabajo, pero me inquieta profundamente que estas normas transitorias presentan un sesgo discriminatorio, especialmente con Haití. Se les somete a tener una visa de turistas de 30 días, que solo tendrán una cuota migratoria y solo para personas que ya tengan vínculo, requisitos que exceden la posibilidad real de las personas migrantes para poder acceder a esas visas, con plazos muy cortos, entre otras cosas".

Al obispo auxiliar de Santiago y vicario de la Zona Oeste, le parece razonable que se tomen resguardos frente a personas con malos antecedentes, pero le preocupa que "se transforme en una migración selectiva". Recuerda el pastor que "el Papa nos ha propuesto cuatro verbos que la Iglesia ha asumido como propios para acompañar la migración: acoger, proteger, promover e integrar a los migrantes, verbos que iluminan este tipo de cosas".

Para ayudar a orientar en todo este nuevo proceso implementado por el gobierno, durante el mes de mayo la Iglesia de Santiago estará repartiendo un informativo en todas las parroquias de la arquidiócesis con información de las nuevas disposiciones migratorias, el cual también está disponible en www.iglesiadesantiago.cl