Lunes 29 de noviembre de 2021
Cardenal Celestino Aós preside misa de inicio del Tiempo de Adviento
"Los obispos y los párrocos debemos escuchar al Espíritu Santo, que nos habla en los fieles; los laicos deben escucharse a sí mismos y a los pastores” dijo el arzobispo en la Catedral Metropolitana este domingo. En la celebración eucarística, con la que comienza la espera del nacimiento de Jesús, el arzobispo también bendijo a un grupo de madres embarazadas.
Fotos: Héctor Landskron
Periodista: Enrique Astudillo Baeza
Fuente: Iglesia de Santiago
En su homilía el arzobispo invitó a los asistentes a la eucaristía a poner en un lugar muy importante este tiempo de la Iglesia. "Jesucristo viene hacia nosotros. Nosotros tenemos que salir al encuentro con Jesús que viene. Tenemos que movernos, no para volver a lo anterior, sino para encontrarnos con la vida nueva", animó.
Respecto de la contingencia que vive el país por la pandemia, el cardenal preguntó. “¿Para qué necesitamos el Adviento, para qué necesitamos un Salvador? Aprendamos a abrirnos a Dios y a caminar juntos, porque o nos salvamos todos juntos, o no hay salida posible", precisó.
Al cierre de su exhortación manifestó que el Tiempo de Adviento siempre es un momento concreto en la vida. “Tan concreto como que la nueva vida siempre, es sagrada desde el primer momento de su concepción, está en el vientre de una mujer. Los obispos y los párrocos debemos escuchar al Espíritu Santo, que nos habla en los fieles; los laicos deben escucharse a sí mismos y a los pastores”, mandó.
El Arzobispo de Santiago, antes de concluir la eucaristía, destacó el rol de la Virgen María en este tiempo, "con su disposición a hacer la voluntad de Dios, ya desde antes de su concepción virginal e impartió la bendición a tres madres embarazadas presentes en la Catedral, a quienes llamó a esperar la vida definitiva, que es compartir la Gloria de Dios.” Al bendecir a estas futuras madres, bendecimos a todas las mamás de nuestra iglesia”.
Leticia Carrasco, llegó hace siete años desde Concepción junto a su pareja por trabajo y tras un tiempo intentando ser padres, por fin se pudo concretar este anhelo. “Quisimos venir a dar las gracias, porque por fin pude quedar embarazada y venimos a pedirle a Dios y a la Virgen María que nazca sanito. Para nosotros significa mucho que el cardenal nos pudiera bendecir. Nosotros nos conocimos en la Iglesia y llevamos muchos años juntos. Por eso es importante seguir la religión y la fe para transmitírsela a nuestros hijos”, analizó.
Yosman Colmenares, llegó desde Venezuela hace tres años y es un fiel devoto de la misa dominical en la Catedral de Santiago, por eso era muy importante este día. “Fue una misa fabulosa, harta familia y es una alegría verla con tanta gente. Ver que la gente le está dedicando tiempo a Dios es muy bueno. Ver mujeres embarazadas pidiendo la bendición, también es muy bueno. Ojalá que el Espíritu Santo nos bendiga a todos y nos regale amor y esperanza”, rogó.