Peregrinación al Santuario de Lourdes: Una Jornada de Fe y Comunidad para los Adultos Mayores

La peregrinación comenzó con el rezo del Santo Rosario a las 11:15 hrs., seguido por la Santa Misa, presidida por Monseñor Fernando Chomali G., Arzobispo de Santiago. En su mensaje a la comunidad, Monseñor Chomali destacó la importancia del amor de una madre como un reflejo tangible del amor de Dios, recordando a los presentes que “si una madre impregna a su hijo de amor, cuánto más es el amor de Dios, quien nos da entrañas de misericordia y entrega a su propio hijo por nosotros”. Además, llamó a los participantes a recordar que “somos hijos de Dios, amados por Él hasta el extremo”, enfatizando el valor de esta verdad para acompañar y consolar a quienes se sienten solos, desamparados o sin esperanza.

Asimismo, Monseñor Chomali subrayó la relevancia del servicio desinteresado que realizan las pastorales, comparándolos con la figura de María, quien transforma la tristeza y el sufrimiento en esperanza y confianza. “Ustedes son quienes ponen la soledad en la tinaja y la convierten en compañía”, expresó, resaltando la labor silenciosa y muchas veces anónima de quienes sirven en esta pastoral, que se convierte en “una iglesia que no sale en las páginas sociales, pero que está grabada a fuego delante del Señor”.

Con el propósito de inspirar a los presentes, Monseñor Chomali los alentó con el llamado de la Virgen María: “Hagan todo lo que Él les diga”, animando a la comunidad a “construir una iglesia según el corazón de Cristo, al servicio de los demás”. Además, destacó que “una pastoral con poco recurso pero con mucho amor es una pastoral viva”, subrayando que el verdadero valor de esta labor radica en el amor y la entrega con que se realiza.

Entre los asistentes, Lisset Ulloa, de la Comunidad de Santa Margarita de Escocia y encargada de uno de los grupos del comedor de la parroquia, conocido como “Contento Señor Contento”, expresó su alegría por participar en esta instancia. “Para mí este es un gran inicio para celebrar a nuestra madre, la misma que también nos impulsa y nos hace también tener el don de mamá. Así que feliz de esta instancia, de poder compartir adelante”, comentó, destacando el valor de esta peregrinación para su vida y labor comunitaria.

Asimismo, Ruth Araya González, representante de la Vicaría del Norte, Zona Norte, y de la parroquia San Alberto Hurtado, compartió su emoción y agradecimiento: “Somos de un grupo de adultos mayores que se llama Contento, Señor Contento, que ya lleva 19 años activos. Este proceso que se hizo hoy es solamente para los puros adultos mayores. Estamos muy contentos con esto que estamos viviendo en este mes. Le damos gracias al Señor de compartir la palabra de Él y de nuestra Madre María. Muchas gracias”.

La jornada concluyó con un compartir fraterno, donde los participantes tuvieron la oportunidad de fortalecer sus vínculos y encontrar consuelo en la comunidad. Esta peregrinación es un reflejo del compromiso del Arzobispado de Santiago con el bienestar espiritual y emocional de los adultos mayores, promoviendo espacios de apoyo y esperanza en cada una de sus iniciativas.