Miércoles 15 de junio de 2022
Jóvenes de Santiago renovaron su amor en Cristo en encuentro de Oración en Picarquín
El encuentro reunió a más de 90 jóvenes de la Arquidiócesis de Santiago, quienes durante todo el fin de semana encontraron un espacio de descanso, de compartir experiencias y de relación con Dios.
Fotos: Jorge Salomón- Omar González- Nibaldo Pérez
Periodista: Andrés Labrín
Inspirados en el lema “Renueven su amor en mi”, la Vicaría de la Esperanza Joven, convocó a más de 90 jóvenes de las diferentes zonas de la Arquidiócesis de Santiago al encuentro de oración de Agentes Pastorales 2022. Tal fue el éxito de la iniciativa, que se logró incentivar a ocho personas de la Diócesis de Melipilla, pertenecientes a la comunidad Niño Jesús de Malloco.
Corría la tarde del viernes 10 de junio, cuando poco a poco las maletas y bolsos comenzaron a ser visibles por calle Moneda, a las afueras de la Vicaría de la Esperanza Joven. Se trataba de cerca de un centenar de jóvenes, quienes con mucho entusiasmo se volvían a reencontrar tras dos años, para subir a los buses que los llevarían hasta la Hacienda Picarquín para vivir un encuentro enfocado en la renovación de su amor a Cristo y a su compromiso de fe en su servicio.
El encuentro que se extendió hasta el domingo 12 de junio, tuvo en su jornada sabatina la visita del Arzobispo de Santiago, cardenal Celestino Aós, quien compartió junto a los jóvenes y confesó a quienes estuvieran dispuestos. Además, durante esa mañana, los Agentes Pastorales, reflexionaron sobre la lectura de Felipe y el eunuco, este último era un sirviente de la reina Candace. Esta Lectio Divina, los invitó a reflexionar y a dejarse arrebatar por el Espíritu Santo, para que, así como Felipe, se pueda transformar la vida de otro y con ello, poco a poco la propia historia y la historia de la comunidad, llevando la Buena Noticia a los demás.
Para Alejandro Vergara, joven que participa en la parroquia Nuestra Señora del Carmen de Maipú de la Zona Oeste, “ha sido un encuentro muy bonito, me ha llenado de esperanza, de alegría, en esto tiempos difíciles que me ha tocado pasar a raíz de la universidad y por los temas nacionales. Un retiro, siempre viene bien”. Además, indicó, “lo que más he rescatado en este retiro ha sido la lectura de Felipe. Hay mucha gente que en estos tiempos están perdidos y se necesitan personas que sean como Felipe, que salgan a buscarlos, a encontrarlos y traerlos nuevamente al camino del Señor”.
A la luz de cinco Santos y beatos, los participantes de este encuentro lograron reconocer a partir de sus historias, como ser testigos y testimonios del Espíritu de Dios. Se trató de Carlo Acutis, el beato de los jóvenes; Santa Teresa de los Andes, Don Juan Bosco, José Sánchez del Río (Joselito) y Sandra Sabattini, quienes a través de unas imágenes estuvieron distribuidos en cinco estaciones, las cuales estaban ornamentadas con sus principales frases y fueron visitadas por los agentes pastorales que se encontraban en el lugar.
Raiza Mofré, de la Zona Cordillera destacó la actividad del recorrido de los Santos y beatos. “Me gusta mucho Santa Teresita, aunque sea muy conocida, difícilmente uno conoce bien su historia. Tiene una historia muy linda y ella sufrió mucho, pero aun así amó mucho, así que me gusta mucho ella”, comentó.
Para Manuel Farr, perteneciente a la comunidad de San Luis Rey de la Zona Norte, “es una alegría volver a reencontrarnos con tantos jóvenes de las distintas parroquias de nuestra Arquidiócesis. Estábamos muy expectantantes y con muchas ganas de vivir este encuentro, que para nosotros los animadores y agentes pastorales, es una alegría poder participar, reencontrarnos y vivir este encuentro con Jesús". Así también, María Victoria Valderrama, formadora de este mismo sector de Santiago, “ha sido un encuentro de conocer muchas personas, de conocer otras realidades y hay muchos jóvenes que se están reinsertando en sus comunidades y quieren darle vida a su pastoral”.
Margarita Vásquez, de la parroquia San Luis Rey, es primera vez que participaba en este tipo de encuentros. “Es una experiencia totalmente nueva y ha sido súper enriquecedor encontrarse con experiencia que tienen los mismos fines, que están ayudando a la gente de su parroquia” , rescató.
Estefanía Izarnótegui, de la parroquia Jesús de Nazareth de Estación Central en la Zona Oeste, rescató la alegría de ver a tanta gente participar y hacer el cambio que la Iglesia necesita, “ver que hay tantas personas con el ánimo de hacer ese cambio, es una gran base para compartirle a las personas que conozco, y decirle mira, no es lo que tú piensas, la Iglesia es mucho más que eso y estamos dispuestos a recibirte y que tienes un lugar aquí también”.
Durante la noche del sábado se vivieron dos momentos muy especiales, en primer lugar, se compartió un espacio de oración y reflexión, acompañado de las reliquias del beato Carlo Acutis; para luego, vivir la vigilia del Espíritu Santo, con oración, cantos guiados por el grupo Kerygma y finalizar con la adoración al santísimo, en un espacio personal e íntimo con Dios.
Ya en día domingo, hubo un primer momento de compartir las experiencias vividas en este encuentro. Óscar Aravena, de la Zona Cordillera, manifestó que “este encuentro ha sido una muestra y una renovación de fe muy importante. He aprendido muchas metodologías de mis compañeros catequistas. El poder encontrarnos y poder trabajar juntos, fue algo que me marcó mucho”. Añadió, “si mostramos como es realmente la vida de un cristiano y como nos mostramos en ese camino de santidad, nuestra propia vida hablaría por sí misma y podría ser un ejemplo para atraer a más personas”.
Para finalizar el encuentro, los jóvenes vivieron la misa de cierre, en torno a la fiesta de la Santísima Trinidad, en la que el Vicario de la Esperanza Joven, padre Jonattan Muñoz les comentó en la homilía, “agradecer que esta Trinidad se ha manifestado durante este fin de semana y ha sido este lema lo que ha tocado el corazón de cada uno de nosotros, lo que ha cambiado las expectativas es el amor de Dios, por eso nos renovamos en el amor, porque solo desde la centralidad de la persona del Señor, podemos empezar nuestra misión”.
Al finalizar la eucaristía, el Vicario destacó el encuentro como un espacio en que los jóvenes pueden descansar, reposar en la figura de Cristo Jesús y sobre todo vivir en comunidad. “Esa es la apuesta de la Vicaría, de poder encontrarse con otros jóvenes y eso me puede hacer bien a mi; y ese bien lo puedo llevar a mi comunidad, así que los invitamos a seguir participando en las actividades de la Vicaría de la Esperanza Joven.”