San Pedro Nolasco fue celebrado por su mensaje de amor y valentía con el prójimo

Marianella Brehman pertenece a un grupo laico mercedario hace 30 años. Siempre reserva el 6 de mayo para asistir a la Basílica de la Merced, ubicada en las calles Mac-Iver con Merced. Este día se celebra a San Pedro Nolasco, fundador de la Orden de la Virgen de la Merced, que entregó su amor para liberar a los cristianos esclavizados en el siglo XIII por los musulmanes.

“Él se desprendió de todo y vivió con valores acordes a los principios católicos. Acogió a personas sin importarle quiénes eran. Además, siempre estuvo cerca de la oración y de Jesús, preocupándose de transmitir eso a la gente”, relató esta devota del santo que fue celebrado en una misa oficiada por el Arzobispo de Santiago, Celestino Aós.

Durante la homilía, el representante de la Iglesia Católica señaló que “el Padre vive en cada uno de los seres humanos, especialmente en los más pobres. San Pedro Nolasco fue un mensajero del amor y la libertad cuando muchos cristianos estaban a punto de perder la fe; se preguntaban ¿nos ha abandonado Dios?”.

La misión mercedaria en la actualidad

Si bien en la época la labor de esta orden consistía en salvar a los cristianos de ser vendidos como esclavos con destino a África, actualmente hay realidades como la droga, la explotación sexual, entre otros problemas que mantienen a personas oprimidas.

Por ello, el cardenal enfatizó la necesidad de continuar con la misión para socorrer a quienes sufren. Hay que “mantener la fe con amor y comprensión con los otros (…) acogerse fraternalmente abriendo el corazón”.

Por su parte, el sacerdote Edgardo Arriagada, vicario subrogante (Mario Salas) de la provincia mercedaria de Chile, contó que desde su niñez encontró en Pedro Nolasco una inspiración. Sobre la Orden indicó que “llegamos a Santiago en 1548; a través de los largos siglos vividos aquí, se han ido construyendo varios templos”.

En tanto, Carlos Anselmo, sacerdote párroco de la Basílica -monumento nacional-, señaló que los valores del santo hoy se traducen en tareas como “la educación por la libertad y dignidad de cada persona; también en los hogares de niños/as y jóvenes donde brindamos atención focalizada para hacerlos conscientes, asimismo en las parroquias”.

Así, se vivió un ambiente de paz donde la misa reflexionó sobre la importancia de vivir por el prójimo, practicando una vida comunitaria con cercanía y amistad, tal como lo hizo el valiente San Pedro Nolasco por el bien de la comunidad.