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Mirna Miranda, Tesorera Directorio de Fundación Frè
Fue en la Parroquia San Saturnino en donde tuve una experiencia profunda de fe, y en ese contexto Dios puso en mi camino a mucha gente que me entregó mucho y que me acercaron a Jesús. Fue así como llegó a mis manos el libro de Magdeleine de Jesús, una mujer muy especial, cuyas experiencias me provocaron curiosidad y muchas ganas de ahondar en mi espiritualidad. Ella es un ejemplo de entrega a los demás, de humildad, de valentía. En este libro cuenta lo que vivió y lo que sentía en cada momento. Se desprendió para darse. Recomiendo este libro a todos, principalmente a quienes están en estos momentos buscando su camino y a quienes lo han encontrado y desean mantenerse firmemente en él y compartir su experiencia personal con otras personas.
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Ignacio Sánchez, rector UC
“El Principito”, de Antoine de Saint-Exupéry. Lo leí de muy niño y lo he releído muchas veces. Tiene la peculiaridad de que cada vez que uno lo lee, nuevamente recrea situaciones diferentes y saca nuevas enseñanzas. Es un libro para niños, jóvenes, adultos, personas mayores, en donde la profundidad de sus ejemplos, de sus metáforas, de sus enseñanzas, nos pueden dar un camino para responder muchas de las preguntas que tenemos. Ha sido un compañero de muchos años de la vida. Hay muchísimas versiones, ilustraciones, formatos del libro, y creo que eso también forma parte de esa magia que tiene el mensaje del autor.
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Macarena Gayangos, editora Radio María
Les recomiendo "El Evangelio Secreto de la Virgen María", del sacerdote español Santiago Martín. En esta novela es la propia Virgen quien le relata a San Juan, quien la cuida, su vida desde la anunciación. Revelando una mujer valiente que amó profundamente, pero que también sufrió hasta el extremo al ver morir a su hijo. Un libro ágil y entretenido de leer que nos regala la posibilidad de "escuchar" a esta mujer extraordinaria que cambió la historia para siempre.
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Padre Sergio Naser, fundador del Policlínico Obispo Enrique Alvear
Me impactó mucho “La Ciudad de la Alegría” de Dominique La Pierre. Relata una realidad muy cruda y cada capítulo termina con una reflexión positiva y esperanzadora. Por lo tanto, es muy beneficiosa su lectura para tantos y tantas que han sufrido las consecuencias de la pandemia, de la guerra, de la migración, del daño ecológico, de la violencia, del encarecimiento de los alimentos, etc.
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Andrea Idalsoaga, Delegada Episcopal para la Verdad y la Paz
El libro que me marcó mucho espiritualmente es "Historia de un Alma", de Santa Teresita de Jesús o Santa Teresita de Lisieux. En él, ella va descubriendo su camino espiritual. Ella se sentía muy frágil, como muchos de nosotros, muy débil, muy pequeñita. Ella habla de su infancia espiritual, pero lejos de ser infantil, es de una profundidad inmensa porque ella descubre que el amor de Dios suple todo y, a pesar de esa fragilidad, ella es capaz de todo en el amor de Dios. Amar a Dios significa dejarse amar por él, y por eso ella va a sufrir mucho, pero no tiene miedo junto a él. Con Él, lo podemos todo. Sin Él, no podemos nada.
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Hernán Hochschild, director ejecutivo de Tenemos que Hablar de Chile
“De ratones y hombres”. Es un libro del premio nobel estadounidense John Steinbeck. Es en la época de la gran depresión, son dos personajes George y Lenny, ellos viajan buscando trabajo en distintos campos en California. Su sueño es asentarse, tener un lugar, echar raíces. Es un libro trágico, duro y fuerte. Pero, yo de una forma indirecta aprendí la importancia de echar raíces profundas en la tierra cuando uno quiere también mirar al cielo.
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Valeria López, Secretaria General Adjunta del Episcopado de Chile (CECh)
El libro que escogí pertenece a la literatura infantil. Se trata de “Corazón” de Edmundo de Amicis. Es un libro que leí cuando estaba en la escuela básica y a través de los relatos del protagonista, Enrique, quien también está en su etapa escolar, uno va creciendo emocionalmente en ciertos valores vinculados con la familia, el sacrificio, con la inclusión en los rostros de cada uno de sus compañeros de clase. Y también en valores cívicos, como el amor a la patria y el patriotismo.
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Padre Luis Felipe Herrera, editor de Vatican News
Las vidas de santos bien redactadas, alejadas de cualquier tipo de pietismo y cercanas a la realidad, siempre me han nutrido y avivado el espíritu. El libro “El apóstol de los leprosos”, de Wilhelm Hünermann, me marcó mucho de joven, pues describe muy vívidamente la vocación y entrega de san Damián de Molokai, religioso y sacerdote de la Congregación de los Sagrados Corazones. El relato muestra progresivamente cómo él fue comprometiendo toda su existencia al servicio de quienes en la segunda mitad del siglo XIX habían contraído la lepra y eran confinados a morir en una isla perdida en el Océano Pacífico. La narración del autor es fascinante, al igual que el resto de sus libros, y permite conocer el discernimiento que a lo largo de sus años impulsó a Damián a dar su vida, configurándose con Cristo y con sus hermanos descartados
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Hermana Gabriela, directora de la Corporación Dolores Sopeña
“El nombre de Dios es Misericordia” del Papa Francisco y Andrea Tornielli. Se trata de un diálogo sencillo, en el que se destaca la experiencia de la misericordia de Dios en la vida del Papa Francisco. “La centralidad de la Misericordia representa el mensaje más importante de Jesús” nos dice el papa Francisco, y también nos recuerda que “la misericordia es una actitud divina” con ella, la misericordia nos abraza, Dios se entrega a nosotros, nos perdona nos acoge en el pecado para sanarnos y nos recuerda que como médico “ha venido por los enfermos, no por los sanos”. La humanidad está herida y necesita de la misericordia de Dios, no sabe cómo curar las heridas de la desigualdad, de la pobreza, de la injusticia, de la pandemia, de tantas pérdidas en estos últimos años, sin la presencia misericordiosa de Dios no podremos hacer frente a nada. Y desde mi experiencia social evangelizadora, pienso que la misericordia tiene un papel fundamental. “El carácter social de la misericordia obliga a no quedarse inmóviles” nos dice el Papa. En este contexto, el libro nos anima a tener los ojos abiertos para descubrir y acompañar el sufrimiento de tantas personas, y así, trabajar para que la justicia y la vida digna no sean frases repetidas sino un compromiso que dé razón de nuestra hermandad a través del testimonio, haciendo presente el Reino de Dios en su identidad misericordiosa.
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Jaime Valderrama, psicólogo colaborador Fono Escucha, línea gratuita de atención de salud mental
“El sanador herido” de Henri Nouwen. Él es un psicólogo y sacerdote. Explica muy bien cómo todos aquellos que se dedican a sanar a otros, lo pueden hacer a pesar de las heridas y cicatrices internas que cada uno tiene. Es un buen libro, especialmente el último capítulo.
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