Con éxito concluye el encuentro virtual que abordó la muerte con sentido cristiano

Más de 120 personas, principalmente agentes pastorales y también diáconos, profesoras de religión y acompañantes espirituales de al menos cinco parroquias de Santiago y otras diócesis del país, se unieron a la transmisión vía redes sociales para participar del diálogo abierto “Sentido cristiano del sufrimiento y la muerte en familia”, acompañado por el padre Eduardo Pérez-Cotapos SSCC.

En su exposición, el padre enfatizó la necesidad de hablar sobre la muerte, señalando que si bien es un tema complejo, que nos asusta y desconcierta, e incluso puede desajustar nuestra salud emocional, es importante enfrentarlo. Para ello, el religioso repasó los libros de la Sabiduría en el Antiguo Testamento, marco que utilizó para que los participantes pudieran comprender la importancia de resignificar el sentido de la muerte, desde el punto de vista de la fe.

“La muerte menos temida da más vida, decía un viejo refrán. El pecado nos maneja por el miedo a la muerte (...) Tenemos que evitar la tentación de pensar que el dolor, la enfermedad y la muerte son castigos divinos o son voluntad de Dios, como si fuera una especie de venganza. Eso nos pone en la peligrosa idea de un Dios que quiere vengarse. Ese no es un Dios cristiano” reflexionó el padre.

El sacerdote se refirió a la importancia de los lazos que se construyen en la vida y la pérdida de sentido y desgaste que se sufre cuando las personas que nos acompañaban ya no están. “El momento de la partida agudiza en nosotros la conciencia de la fragilidad personal, la necesidad que tenemos de caminar con otros”, dijo.

Abordó además, la experiencia de abandono que se vive con la muerte de los padres, al vacío que se siente al perder a un par, el dolor de ver partir a un hijo, la experiencia de ver morir a quien sufre por enfermedad. También, la eutanasia y la posibilidad de prolongar la vida sin caer en el ensañamiento terapéutico y la importancia de celebrar la vida, incluso aquellas experiencias que no han sido del todo positivas, pero que nos han dejado un aprendizaje.

El encuentro concluyó con una ronda de preguntas de la audiencia compuesta principalmente por agentes pastorales de las parroquias Cristo Resucitado, Nuestra Señora del Carmen, Teresita del Niño Jesús, San Bruno y Santa Bernardita, entre otras; además de psicólogos y acompañantes espirituales del CAF, profesoras de religión, diáconos, secretarios pastorales de las Zonas Sur y Cordillera e incluso agentes de otras diócesis quienes permanecieron por más de una hora conectados, atentos a las palabras del párroco. 

Entre ellos, Álvaro Ahumada, diácono de la diócesis de Melipilla quien quiso participar ya que además se está formando como acompañante en el curso de Acompañamiento en el Duelo organizado por el Arzobispado de Santiago. “Este tema para mi trabajo pastoral es importantísimo, sobretodo en este tiempo que la gente necesita acompañamiento. El encuentro fue muy bueno y didáctico, donde el tema fue muy bien abordado y nos dio herramientas para el trabajo que uno hace”, afirmó. 

Para el diácono José Manuel Borgoño, delegado de la DEFAM la actividad cumplió con las expectativas. “Fue un encuentro muy interesante, muy útil para la gente que mostró un alto interés interactuando y levantando temas que abordaremos en futuras conferencias”

Sobre el expositor

El padre Eduardo Pérez-Cotapos es sacerdote de la congregación de los Sagrados Corazones, con 40 años de servicio a la Iglesia. Actualmente sirve como párroco en la parroquia de La Anunciación (Providencia).

El padre Pérez Cotapos es Doctor en Teología de la Universidad Gregoriana y además ejerce como docente de la Facultad de Teología de la Universidad Católica de Chile.

Puedes revisar la exposición del padre en el Fanpage de la DEFAM en www.facebook.com/pastoralfamiliarsantiago