Culminó la Semana Teológica Pastoral

Este viernes se realizó la jornada de cierre del encuentro pastoral que cada año realiza el Arzobispado de Santiago, junto a sacerdotes, diáconos permanentes, religiosas y equipos de laicos de las distintas vicarías, con el objetivo hacer eco de las acentuaciones pastorales, y reflexionar sobre distintos temas que atañan a la Iglesia en medio del contexto actual.

Para el sacerdote Héctor Gallardo, Vicario Pastoral a cargo de la organización de la jornada, "esta Semana Teológico Pastoral pone en el corazón de la Iglesia de Santiago el deseo de profundizar en el querer ser Pueblo de Dios, y nos instala el tema del discernimiento".

En este sentido, la jornada de hoy tuvo como tema principal una reflexión sobre el "discernimiento comunitario", presentado por el Director del Departamento de Espiritualidad, sacerdote Fernando Tapia, quién se refirió a "la necesidad del discernimiento comunitario para reorientar la acción pastoral de la Iglesia".

Tapia explicó que "hablamos de discernimiento porque ni el descubrimiento y priorización de los desafíos, ni la formulación de Líneas Pastorales que permitan la confección de una Plan Pastoral, pueden ser el resultado de un simple análisis humano. Menos aún presiones indebidas, de manipulaciones o de imposiciones de uso grupos sobre otros, y tampoco el resultado de una obediencia ciega, perezosa e irreflexiva. Ambos deben ser, indudablemente, el fruto de un discernimiento comunitario, creyente y pastoral".

Frente a los desafíos de hoy, en relación al anuncio de la palabra, la hermana Claudia Hernández, explicó la necesidad de "ser capaces de partir desde la catequesis de la experiencia. Si queremos que la catequesis realmente lleve a Jesús y lo lleve a una vida cristiana, necesitamos ir a la experiencia. Creo que lo más importante es tener a Jesús en el centro y contemplar cómo él cómo se relacionó con las personas, cómo acompaño y fue capaz de suscitar que los demás fueron sus discípulos, cristianos, creyentes. Por ello, estamos a llamados a formar discípulos y a formar para la vida, es decir una fe que se inicia y que es permanente".

Al continuar, el padre Jorge Muñoz se refirió a que es importante "volver a pensar en el modo en que hacemos Iglesia hoy. Las estructuras deben estar al servicio de la misión y no lo contrario" expresó. Agregó que los desafíos de hoy están en la atención a migrantes, a poner a la persona en el centro, la promoción de la interculturalidad, el servicio a los más vulnerables como respuesta a la crisis de la Iglesia, la importancia de tender puentes entre las distintas realidades de la ciudad, además del cuidado de la creación.

La jornada culminó con la exposición del Informe Económico del Arzobispado, presentada por el Administrador de Bienes, Mauricio Domínguez, en la que se dieron a conocer los ingresos y gastos de la arquidiócesis durante el año 2018.