Se inició Escuela Arquidiocesana de Formación AES

El Vicario de la Esperanza Joven, monseñor Cristián Roncagliolo, recordó a los asistentes la importancia y el legado que deja este tipo de instancias: "Lo más importante de esta escuela es formarlos en la fe para que crezcan como buenos cristianos y para que sean testigos de que Cristo está resucitado. Cuando uno forma jóvenes para ser buenos cristianos, saltan las vocaciones, porque quien se encuentra con el Señor, sabe para qué Dios lo llama".

Luego, invitó a todos los jóvenes a encontrar las claves de este tiempo: "Recuerden siempre las raíces de nuestra fe. La Palabra, la eucaristía, la Virgen María, vivir la caridad y el apostolado", les dijo.

Victoria Valderrama, Formadora en la zona Norte, extendió la alegría por tan bello momento: "Lo viví en el año 2012 y hoy tengo mucho ánimo de que muchos más jóvenes quieran ser formadores para otros jóvenes en la fe y seguir traspasando estos conocimientos y como dijo el padre, sean portadores de Cristo resucitado. Que nadie los calle y lleven siempre la Buena Noticia".

Queremos animadores formados, que puedan llevar la alegría, de poder animar a otros jóvenes en la esperanza. Este año tenemos una gran cantidad de animadores en las distintas zonas y creemos que como Equipo de Pastoral, esto tiene una importancia real, ya que la formación es una parte importante de la vida de fe de los jóvenes y por eso, queremos llegar a las parroquias, a las capillas y este proceso, ayuda mucho en eso", reforzó Claudio Cornejo, de la Vicaría de la Esperanza Joven.

La Escuela Arquidiocesana, llevada a cabo por la Vicaria de la Esperanza Joven en conjunto con las Pastorales Juveniles de cada zona, busca formar a jóvenes católicos, entregándoles herramientas teológico-pastorales para que crezcan en su experiencia de fe, sacramental, de comunidad cristiana y misionera, y con todo ello, desde la vivencia de la formación recibida, puedan ayudar a otras comunidades de vida cristiana.

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