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Viernes 7 de diciembre de 2018

Franciscanos crean comisión para tratar temas de abusos

"Francisco anda y repara mi Iglesia" es la delegación que busca ser un signo de comunión y acompañamiento fraterno, en medio de la actual crisis de la Iglesia.

Fuente: Comunicaciones Orden Franciscana

Inspirados en la experiencia de San Francisco, cuando rezándole al Cristo crucificado de la ermita de San Damián, éste le dijo: "Francisco anda y repara mi Iglesia que amenaza ruinas", la delegación se ha planteado el objetivo de ser parte de la renovación de la Iglesia, a través de un trabajo en prevención de abusos y promoción de ambientes sanos, desde los dones de su propia espiritualidad.

"Esta comisión tiene una dimensión eclesial, creyente, porque somos movidos por la fe y sabemos que cada persona es sagrada, es hija de Dios y es nuestro hermano. Por ello, tenemos que cuidar el respeto y la valoración desde la persona, haciendo consciencia sobre el cuidado de la vida y, sobre todo, de las personas más vulnerables. Queremos ayudar a los frailes y las comunidades con acompañamiento, reflexión e iluminación, para cultivar los espacios limpios y de buen trato", comentó el hermano Isauro Covilli, Provincial de la orden.

La comisión FARMI está formada por el hermano Isauro propulsor de la iniciativa; el hermano Santiago Andrade, Vicario Provincial; Claudia Tzanis, periodista; Marcela Corvalán, abogada; Rodolfo Núñez, psicólogo e Yvan Lailhacar, psiquiatra. Equipo multidisciplinario, en el que cada integrante, a través de su experticia, contribuye en la reflexión sobre la forma adecuada de llevar adelante los procesos de formación y acompañamiento en problemáticas humanas y de abusos, dentro de las comunidades con presencia Franciscana.

"Queremos aportar desde distintas miradas al cambio cultural de la sociedad y de la Orden Franciscana, mediante el trabajo comunitario y sinodal. Nuestro desafío es acompañar a las comunidades para evitar las malas prácticas y el abuso de poder, conciencia o sexual, y hacernos cargo de que este tema atraviesa a la sociedad chilena en todos los ámbitos, no solo el eclesial. Aprovechemos la fraternidad para volver a iluminarnos, para dialogar, renovar confianzas, sentirnos familia, acompañar a los hermanos que quizás estaban muy solos", comentó Claudia Tzanis.

Según explica la abogada de la comisión, el Derecho Penal Canónico no sólo tiene por objeto la sanción, sino que también la reparación y el análisis frente al origen de las problemáticas. "Nos ayuda mucho para revisar las conductas y relaciones dadas dentro de las comunidades Franciscanas, reflexionando sobre la relación entre pares, relaciones con la autoridad y la fraternidad. La ley canónica nos aporta en el mejoramiento entre las relaciones de convivencia social y por ello es tan importante poder realizar estas reflexiones desde un equipo especialista en diversas disciplinas, siempre bajo el espíritu Franciscano, que es la riqueza de este trabajo", comentó Marcela.

Si bien cada provincia es autónoma en su actuar pastoral y comunitario, la comisión pretende ayudar con directrices que permitan propiciar el diálogo, renovar las confianzas, promover políticas de prevención y buen trato, y de ser necesario, mediar en algún conflicto.

La comisión ya se encuentra trabajando en el itinerario de trabajo para 2019 y 2020, y en el análisis y mejoramiento del actual protocolo de abusos de la Orden Franciscana, a fin de ser un aporte real en el proceso cambios de la Iglesia. Tal como lo pidió el Papa Francisco en su Carta al Pueblo de Dios que peregrina en Chile: "Con Ustedes se podrán dar los pasos necesarios para una renovación y conversión eclesial que sea sana y a largo plazo. Con Ustedes se podrá generar la transformación necesaria que tanto se necesita".