Consagran altar de Parroquia Santo Toribio

El mensaje del Pastor

En su homilía el pastor tuvo palabras de agradecimiento para la comunidad por el esfuerzo y dedicación en la renovación del templo y haciendo alusión al Evangelio proclamado, en donde Jesús observa a la gente que da limosna y pide a sus discípulos poner atención en la bondad de una viuda pobre que da todo lo que tiene, expresó: “Aquí estamos llamados a realizar un primer acto de fe, reconociendo que la vida de esta comunidad y su estructura ha sido un continuo regalo de Dios. Como no darle gracias que nos haya permitido a cada uno de los que está acá, tal vez, como a la viuda del Evangelio, ofrecer lo poco que tenía para que la casa de Dios resplandezca con la belleza que han logrado gracias a su esfuerzo”.

"Muchas veces lo que más nos cuesta dar es precisamente darnos, dar de nuestro tiempo, de nuestro cariño, de nuestra atención, companía, nuestra mano y nuestro corazón. El cristianismo nos enseña que hay más alegría en dar que recibir y en el altar que vamos a consagrar solemnemente, descubrimos el signo de cómo el Hijo de Dios se entrega", agregó.

También hizo una analogía entre la remodelación del templo y la necesidad de renovación de la Iglesia y de las personas, expresando que “la Iglesia que es santa, es al mismo tiempo una Iglesia necesitada de purificación, porque en ella estamos presentes todos nosotros, que somos frágiles, que somos pecadores, que necesitamos una continua renovación. El hecho de haber embellecido este templo llega a ser por consiguiente la necesidad de toda la comunidad cristiana de hacerse más semejante a Jesucristo, de hacerse cada día más santa, más solidaria, evangelizadora y misionera”.

“Quisiera invitarlos a que en este día solemne en que bendecimos los trabajos en este templo parroquial, en este día en que vamos a consagrar el altar que es el signo más importante de lo que es la comunidad cristiana, la presencia de Jesús en medio de nosotros, sea de verdad una fecha, un acontecimiento, que renueve en cada uno de nosotros el propósito de ser la Iglesia Santa de Dios, que nuestro mundo necesita como luz que brilla no con luz propia, sino como luz de Jesucristo”, dijo. 

La comunidad de Santo Toribio

Por su parte el párroco P. Andrés Ariztía, quien es también capellán de la Fundación Las Rosas dijo que, "todo un proyecto de espiritualidad litúrgica y pastoral está aquí. Los vitrales son el árbol de la vida, la creación, el Génesis, recordándonos de dónde venimos y en el altar tenemos un encuentro con la Trinidad, es decir, fuimos creados para ser hijos del Padre, discípulos del Hijo y templos de Espíritu, así que la gente ha ido comprendiendo que esto no es sólo para que la parroquia se vea más bonita, sino que en el fondo hay una catequesis que los ayuda en su identidad cristiana".

Carmen Pizarro, coordinadora del Consejo Parroquial comentó: "Esta es mi parroquia desde el año 1977, así que ya son más de 40 años los que participo en ella. El templo fue construido hace ya varios años, y en su momento fue consagrado, pero como renovamos muchos elementos y la decoramos aún más, se consagró nuevamente el altar, es una grandísima alegría y una emoción enorme".