Jueves 4 de enero de 2018
Jesús es Navidad: Con el hermano, la calle y la cárcel
Motivando a centrar la mirada en Jesús, resaltando la acogida y la solidaridad con los más excluidos, la Iglesia en Santiago celebró la Navidad.
Fotos: Comunicaciones Arzobispado
Periodista: Equipo Encuentro
Fuente: Comunicaciones Santiago
Link fuente: www.periodicoencuentro.cl
Es por ello que en su mensaje de Navidad, el Arzobispo de Santiago destacó: "Paz a ustedes, a sus hogares, a nuestra ciudad de Santiago, a todos y todas quienes desde diversos países de nuestra América Latina y del mundo, han encontrado en Chile un abrazo de acogida, una sonrisa de bienvenida y una mano tendida", agregando: "Con su Hijo que se hace pobre y humilde en el pesebre de Belén, Dios nos revela el camino para ser constructores de comunión, de solidaridad y de futuro para todos".
El cardenal Ezzati además, invitó: "Es saliendo de nosotros mismos y encaminándonos hacia los demás que podremos ser más y mejores; es abriendo el corazón al que sufre, al que está solo o marginado que podremos experimentar el gozo de la fraternidad; es imitando al Hijo de Dios, que viene a compartir su vida con la nuestra, que contribuiremos a fortalecer la cultura del encuentro, de la acogida empática y de la unidad, que hace de nuestra ciudad y de Chile "Un hogar para todos".
Es por ello que el pastor elevó una bendición especial "a los que sufren en los hospitales, en las cárceles, los que viven en viviendas precarias o en la calle y no saben dónde reclinar su cabeza" y también "a los niños, especialmente aquellos que no tienen un papá y una mamá que los cuide, los ame y los haga crecer. Alcance a los pobres y a quienes no tienen esperanza".
"Navidad en la calle" con más de 800 personas en la capital
Paralelamente, en vísperas de Navidad, la Vicaría para la Educación celebró "Navidad en la Calle" en cuatro puntos simultáneos de la capital con almuerzos, actividades recreativas y la celebración de la Eucaristía. Jornada que estuvo dedicada a migrantes y personas en situación de calle. El vicario Andrés Moro dio el vamos a las actividades con la celebración de la Eucaristía a las 10:30 de la mañana en la Fundación "Amigos de la Calle", de Recoleta: "La Iglesia católica invita a todos a hacer una Navidad en la calle, hacernos parte de las personas en situación de calle, migrantes y adultos mayores. En estas fechas queremos que nadie esté solo y que descubramos que Navidad es Jesús", señaló.
Angelo González ha vivido varios años en la calle y relató emocionado: "He estado bien y mal, por las malas decisiones que uno toma, cuesta mucho estar en la calle y gracias a esta Fundación y estas cosas tenemos momentos de felicidad, porque es triste la noche en soledad. Esto nos hace sentirnos vivos y que aún queda esperanza". En Zenteno, fuera de la Basílica Corazón de María, tres venezolanos formaban parte del voluntariado para recibir a las personas que quisieran compartir un almuerzo fraterno.
Diego Romero dedicó ese día a los que más necesitan: "Yo tengo cinco meses en Chile, no es fácil porque mi cuerpo está acá, pero mi mente está en Venezuela. Me invitaron a participar y dije que sí, me encanta trabajar en actividades que tengan el don de servicio, agradecido de Dios de estar acá y poder ayudar".
La navidad de las internas de San Joaquín a la espera del Papa
La tarde del 24 de diciembre, el cardenal Ricardo Ezzati entregó a las reclusas un mensaje de paz y esperanza y las animó a abrir sus corazones para recibir al Papa Francisco. Durante los últimos siete años, el pastor de la Iglesia de Santiago ha visitado a las mujeres del Centro Penitenciario Femenino para acompañarlas y presidir la Eucaristía de Navidad.
En su homilía, el cardenal expresó: "Tengo plena conciencia de los sentimientos que tienen embargado el corazón de cada una de ustedes. Sentimientos de mucha pena porque sus seres queridos están lejos y no pueden celebrar esta fiesta de Navidad con ellos, pero también un corazón lleno de esperanza, porque no miran solamente el pasado, sino que están mirando el futuro, un futuro de liberación y libertades, un futuro mucho mejor".
Estefanía ha pasado diez navidades en este centro penitenciario. Aún le quedan nueve años de reclusión, por lo que esta celebración la llena de júbilo. "Vivir la Navidad acá nos trae un poco de penita, porque yo echo de menos a mi familia, pero esta misa me da alegría, me llena el corazón y nos da esperanzas a mí y a mis compañeras", expresó.
De las 613 internas de este centro, el 51% profesa la religión católica, y se espera que cerca de 500 de ellas puedan participar de la Misa que presidirá el Santo Padre. Sobre esta visita apostólica, el arzobispo dijo a las internas: "El Papa viene a traernos el mensaje de la Paz y espero que puedan abrir su corazón al mensaje que les traerá cuando nos visite".
La hermana Nelly León es capellana hace doce años de este centro penitenciario femenino y ha estado acompañando a las reclusas para tal acontecimiento. "Queremos que el día que venga el Papa no sólo resalten los colores blanco y amarillo, queremos que sea una fiesta multicolor, así que ahora están haciendo flores y grullas. Todas las chiquillas de distintos patios quieren ser partícipes de esta celebración", señaló la religiosa.