Acentuaciones Pastorales 2018 tras Jornada de Planificación

La jornada comenzó con la presentación de las conclusiones de los grupos de trabajo del día lunes, respecto a la educación en la fe, acompañamiento a los jóvenes y el discernimiento vocacional. Las reflexiones se centraron en la importancia de educar la fe dando testimonio, expresando coherencia entre fe y la vida, tanto a nivel personal como eclesial; caminando con el otro, en comunidad. Además, se analizó la importancia de responder a las distintas realidades de la sociedad, profundizando en nuevos y mejores espacios de acogida, diálogo y generación de vínculos, entre otros puntos.

Las conclusiones de los grupos de trabajo se centraron en la necesidad de actualizarse en el método de enseñanza, pero sin perder la esencia. Para ello, parece ser necesaria la renovación de los agentes pastorales en sus premisas y prácticas, entregándoles además un real acompañamiento. Así también es importante que la enseñanza se enfoque más en lo espiritual que en lo conceptual, a través de las experiencias de niños y jóvenes.

Tras lo anterior, se evidenció la necesidad de que la Iglesia de Santiago se transforme en una verdadera familia, transmisora de experiencias humanas en comunidad. Un lugar de pertenencia donde cada persona sienta sus propias raíces, brindando un espacio de diálogo y reflexión para las grandes interrogantes de los jóvenes.

En otro punto, respecto al qué hacer para educar y acompañar la fe de los jóvenes, los grupos de trabajo coincidieron en la necesidad de conocerlos mejor, acogerlos y acompañarlos en su realidad, manteniendo un diálogo intergeneracional, a través del trabajo pastoral integrado por adultos y jóvenes. Asimismo, se mencionó la importancia de partir de lo sencillo a lo profundo, mostrándoles a un Dios cercano, no castigador, un Jesús amigo que comunica su mensaje con claridad.

Finalmente, y en relación a la opción pastoral para promover el discernimiento vocacional, entre otros puntos, se consideró necesario fortalecer la dimensión social de la fe, acompañar individual y grupalmente, contar con espacios que fomenten el discernimiento vocacional (retiros, jornadas, actividades, grupos de oración, entre otras), entregar pistas a la familia para el acompañamiento del proyecto vocacional y de vida, además de explicitar las fuentes que alimentan el discernimiento, como las Sagradas Escrituras, Sacramentos, entre otros documentos.

Acentuaciones Pastorales 2018

El Vicario Episcopal para la Pastoral, pbro. Héctor Gallarlo, fue el encargado exponer la Acentuación Pastorales 2018, que se sustenta en continuar siendo una Iglesia Misionera y Misericordiosa que anuncia a Jesucristo y su Reino. "Durante el año 2018 nuestro gran foco de atención está en el X Sínodo de Santiago al cual hemos sido convocados. La idea es que nuestro proyecto pastoral sea acompañar y ponernos en "modo" Sínodo, discernir, trabajar para que podamos mejorar nuestra acción pastoral con nuestros hermanos más jóvenes", comentó el vicario.

En su presentación, además dio a conocer los objetivos definidos para trabajar en dicha acentuación pastoral:

1. Participar activamente en la preparación y realización del X Sínodo Arquidiocesano, sus convocatorias y actividades.
2. Acoger los lineamientos emanados desde el X Sínodo sobre los Jóvenes, La Fe y el Discernimiento Vocacional e implementarlos en el trabajo pastoral.
3. Incorporar en la vida pastoral de nuestra Iglesia los frutos de la visita del Papa Francisco procurando ser una Iglesia misionera y misericordiosa que sale al encuentro de los más necesitados, de los jóvenes y de las familias.

X Sínodo, una experiencia de fe

La Jornada de Planificación Pastoral 2018, culminó con un mensaje del Arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, quien refiriéndose al X Sínodo de Santiago, lo describió como "una experiencia del Espíritu, una gran oportunidad para aprender a caminar juntos y ser portadores de Cristo, especialmente en los jóvenes".

El pastor exhortó a los asistentes a transmitir la visión fundamental del X Sínodo- el ser una experiencia de fe - en sus comunidades parroquiales, movimientos y colegios. Agregó que la tarea más importante por hacer, es la de los discípulos de Jesús, la de sembradores: "Nuestra tarea es preparar el campo para la siembra, sembrar generosamente, y tirar la siembra para que en su momento oportuno el Espíritu Santo la haga germinar y finalmente pueda madurar en frutos".

En otro punto, el cardenal se refirió a la realidad social que estamos enfrentando en estos meses, haciendo alusión a la aprobación de la Ley de Aborto en tres causales. "No porque la despenalización del aborto se vuelva legal, automáticamente eso es ético. Esto lo hemos dicho claramente y es la manifestación de la fe de la Iglesia, que los cristianos estamos llamados a ser propios".

Agregó que esto no "tiene que hacernos sentirnos derrotados, sino que debemos sentirnos estimulados a una gran tarea y acción evangelizadora en relación a la vida, en todo el arco de la vida.

Respecto a la Ley de Matrimonio Igualitario presentado por la Presidenta Michelle Bachelet esta semana, y la Ley de Identidad de Género, el Arzobispo de Santiago expresó: "Nos encontramos en una situación desafiante, pero que precisamente por eso no nos tiene que aplastar. Tenemos mucho que hacer y sabemos que por la experiencia de Jesús y de la Iglesia que el mal nunca tienen la última palabra. Frente a estas situaciones, ojalá podamos superar la tendencia a la superficialidad y equilibrar los valores esenciales de la vida personal y social".

Para finalizar, el pastor enfatizó en que a través de las cuatro dimensiones eclesiales: evangelizar, vivir en comunión, celebrar y servir, "con muchas iniciativas e itinerarios estamos llamados todos, corresponsablemente, sinodalmente, a ser constructores del Reino de Dios".

Papa Francisco en Chile

Pocos meses faltan para la visita del Santo Padre a Chile, y la comisión organizadora trabaja rigurosamente. Monseñor Fernando Ramos, Obispo Auxiliar de Santiago, Vicario General y Coordinador Ejecutivo de la visita, presentó el estado de la organización, afirmando que esta visita es de carácter Apostólico y de Estado, y que el sucesor "nos viene a animar para seguir construyendo nuestra nación sobre el sólido fundamento de la paz".

Agregó que "el Papa Francisco traerá consigo un mensaje de paz y esperanza a todo nuestro país. Esta no es una visita que tengamos todos los años, sólo hemos recibido al Papa Juan Pablo II y eso fue hace 30 años atrás. Este es un acontecimiento muy relevante para nuestro Arzobispado, para nuestras comunidades y para el país entero, por ello los invito a prepararse en la oración".

El coordinador presentó el logo y lema de la visita: "Mi Paz del Doy", frase mencionada por Jesús a los apóstoles, que desea invitar a todos los chilenos a renovar la esperanza en el encuentro fraterno que surge de la justicia y se traduce en un clima de paz. La oración y el himno de se dará a conocer durante la segunda semana de septiembre.