30 años del Colegio Jorge Alessandri Rodríguez, de Renca

Su directora, Sara Brito, explica que desde hace seis años funciona como establecimiento mixto y hace cinco años incorporó la Educación Media. "Es un colegio de alta exigencia académica, pero también de mucha formación valórica, contamos mucho con los padres, los profesores y comprometidos con su trabajo. Creo que estamos haciendo una gran diferencia aquí en Renca", expresó.
El Valle de Azapa es un sector con mucho narcotráfico, delincuencia y familias que viven serias vulnerabilidades y problemáticas sociales, "pero aquí los niños se forman para crear un futro mejor para ellos, para su propia comuna y para la sociedad", manifiesta Sara Brito. El colegio pertenece a la Sociedad de Instrucción Primaria, SIP, fundada por Claudio Matte hace 160 años (las Escuelas Matte)
Los 30 años de vida del centro educador fueron conmemorados en el gimnasio con la celebración de la eucaristía, que presidió el Arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, cuya presencia fue muy valorada por los docentes y recibida con alegría por los niños y los jóvenes.

La vida: una obra de arte
En su homilía, el pastor pidió a Dios "que bendiga abundantemente esta obra, que nace de una preocupación por el crecimiento humano integral de los jóvenes". Dirigiéndose a los alumnos, les señaló que las posibilidades que toda la sociedad les ofrece para su crecimiento se hacen realidad "cuando cada uno de ustedes decide construir su propia vida en comunión con los demás y a decide construir bien". Puso el ejemplo de un trozo de metal, que el artista lo toma y hace una obra de arte. De no mediar el trabajo del artesano, ese metal sería cualquier cosa. "En nuestra vida sucede lo mismo, detrás de nuestra vida hay personas que están al lado nuestro, pero el artista, el que construye la propia vida con la ayuda de los papás y los maestros es la persona de cada uno de ustedes. Ustedes pueden hacer de su vida una obra de arte o cualquier cosa", dijo.
Luego, el pastor expresó a los estudiantes: "En el colegio, en la familia, en la sociedad, a cada uno se le dan talentos, dones y ayudas. Pero no olviden, su futuro están en sus manos, construir una vida feliz está en cada uno de ustedes, crecer humana y espiritualmente a la estatura alta que Dios sueña para cada uno de nosotros depende de cada uno de nosotros". Añadió que "ustedes tienen la posibilidad de hacer de su vida una obra de arte o hacer de su vida cualquier cosa".
Finalmente, el cardenal Ezzati animó a los docentes y directivos del establecimiento a reavivar su vocación, "el educador no es solamente un instructor, sino uno que es capaz de sacar del corazón de sus alumnos todas las mejores posibilidades para que puedan crecer, y capaz de acompañar la vida de los educandos".
Terminada la misa, el arzobispo compartió con profesores y directivos del colegio y visitó a más alumnos en sus propias salas de clase.