“Santo Cura de Ars” recibió a nuevo párroco

La parroquia Santo Cura de Ars, ubicada en la comuna de San Miguel, estaba este domingo 5 de marzo repleta de fieles. Es que además de la tradicional misa de 12:00 horas, llegaba el momento de presentar al nuevo párroco.

El padre Braga llegó a Chile hace dos años. Primero estuvo en el colegio San Juan Evangelista, de la comuna de Las Condes en Santiago, y luego en la parroquia Buen Pastor de Valdivia. Sobre su llegada a la comunidad de la parroquia Santo Curas de Ars, dijo:

"Para mí es una alegría llegar hasta este lugar. Yo la conozco como una parroquia muy importante de la Zona Sur pero también para nuestra Congregación, de los sacerdotes del Sagrado Corazón de Jesús. Es un desafío, porque a pesar de estar dos años en Chile y yo ser brasileño, la cultura es distinta, pero sin lugar a dudas, lo más importante es la fe y el Reino de Dios. Juntos trabajaremos por eso".

Arzobispo: “Sirvan a los más necesitados”

El Arzobispo de Santiago tuvo las siguientes palabras de bienvenida: “Al nuevo párroco no solo las expresiones de la confianza y de la comunión, sino que también nuestra oración para que el Buen Pastor, lo haga a imagen de Él en medio de todos ustedes. También agradecer el trabajo del párroco saliente con esta gran comunidad”, dijo el cardenal Ricardo Ezzati.

Tras la proclamación del Evangelio, el arzobispo invitó a la comunidad de fieles a reflexionar sobre el texto San Mateo (Mt 4, 1-11) en el contexto de esta celebración de bienvenida. Les pidió a todos preocuparse de los “últimos”:

“Las tentaciones que Jesús supera, escuchando a Dios su Padre, y su palabra, son tentaciones que toda la comunidad cristiana, y cada persona, estamos llamados a superar con su gracia. Muy querido párroco y muy querida comunidad cristiana: Aquí, en esta parroquia, sean testigos y construyan su vida, sobre todo, alimentándose de la palabra de Dios. Sirvan a los más necesitados, a los últimos, como nos pide el Papa Francisco. Vayan a la frontera de esta parroquia para apoyar a la gente que más lo necesita. En la vida cotidiana de su parroquia, sean una comunidad que se funda en el servicio y que puedan vivir como hijos de Dios”.

Sentimientos encontrados

En la comunidad parroquial había sentimientos encontrados: de alegría por la llegada del padre Braga, pero también de tristeza por la partida del padre Hernán Leemrijse. Fueron diez fecundos años de trabajo pastoral del sacerdote holandés.

“Fue un tiempo hermoso con el padre Hernán, él participaba constantemente en todas las capillas, hizo un gran trabajo en nuestra comunidad, siempre nos llamó a la unión, eso lo caracterizó. En cuanto al nuevo padre, ya lo conocemos, hemos conversado con él. Todo cambio siempre es para mejor, así que lo recibimos con los brazos abiertos”, comentó tras la ceremonia Patricio Pino, fiel de la parroquia.

Adriana Wyss, miembro de la comunidad parroquial se mostró emocionada: “Extrañaremos al padre Hernán, era una excelente persona. Muy humilde y bueno con la gente. Era una persona muy especial. Nos iremos adaptando con el tiempo. Tenemos esperanza de que el trabajo con el nuevo padre sea igual o mejor que con el antiguo párroco”. 

El padre Hernán Leemrijse no participó de la ceremonia ya que hace algunos días debió viajar a Valdivia para cumplir sus nuevas labores.