Jueves 4 de junio de 2020
Comunicadores parroquiales de Santiago realizan todas las semanas un encuentro de oración online
En la cuarentena el grupo Mensajeros, que reúne a comunicadores parroquiales de Santiago, se ha convocado de forma virtual para fortalecer su trabajo parroquial y seguir entregando la Buena Nueva de Jesucristo.
Periodista: Paul Pasten - Paula Ampuero
Durante el mes de febrero de este año, los comunicadores o Mensajeros de las parroquias de Santiago se reunieron de forma presencial para definir sus actividades para el año 2020. En la oportunidad, se acordó que se realizarían reuniones periódicas de los coordinadores zonales, un retiro en el mes de abril y otras actividades de formación de manera presencial.
Pero los planes propuestos por este grupo de comunicadores laicos, que se reúne hace más de diez años, no se han podido llevar a cabo de la forma que se esperaba, debido a la pandemia del Covid19. Algunas actividades se han tenido que postergar, pero con el fin de responder a su labor, los Mensajeros junto al equipo de Comunicaciones del Arzobispado de Santiago se han organizado para concretar sus actividades online. Ya se hizo con el retiro de abril, que se desarrolló de forma virtual a cargo del Obispo Auxiliar de Santiago, Alberto Lorenzelli; y con las reuniones de los delegados zonales que se realizan periódicamente por videollamadas.
A lo anterior, como iniciativa de los propios Mensajeros, se sumaron los Encuentros de Vida y Oración, que se llevan a cabo todos los días miércoles, y que se hace de modo online por una plataforma de videollamada.
La opinión de los Mensajeros que han podido participar de estos encuentros ha sido positiva, ya que les permite compartir experiencias de lo que está ocurriendo hoy en las diversas parroquias y sectores.
Así lo comentaron algunas de las participantes. Paola Herrera, delegada de la Zona Norte, sostuvo que "de a poco están dando muchos frutos estas reuniones. Salen todos felices, es lo que se siente". Mary-Ann Roberts, de la parroquia La Transfiguración del Señor, dice que la reunión virtual es "muy buena, dinámica, fluida. Algo muy emotivo y necesario. Por lo general estamos más de una hora conectados y, al parecer, nadie quiere cortar el contacto a pesar de que nos despidamos". A lo que se suma Marlene Blanco, de la parroquia Santa Bernardita diciendo que el encuentro es "muy bueno, porque participamos todos y compartimos bien".