Confirmaciones en parroquia San Antonio de Padua: misioneros del Señor en el mundo

Pasadas las seis de la tarde fueron llegando los jóvenes y adultos que durante meses se prepararon junto a los catequistas de la parroquia, para comprometerse como testigos y misioneros del Señor. Acompañados de sus padrinos y madrinas, los confirmandos repasaron los últimos detalles antes del comienzo de la misa.

Francis Soto,  madrina de una de las jóvenes de confirmación, expresó la importancia que tiene para ella acompañar a su ahijada. “Ser madrina significa una responsabilidad grande, porque demuestra el cariño que tiene mi ahijada hacia mí, significa acompañarla, estar cuando ella lo necesite, estar disponible. La confirmación es un sacramento muy importante porque son adultos, ellos pueden decidir dar este paso”.

Natalia Pérez, ahijada de Francis compartió su motivación para confirmarse. “Todo surgió cuando bauticé a Ángel, mi hijo menor y  me invitaron al grupo de catecumenado de la parroquia, ahí partió todo. Siempre hemos sido bien apegados a la iglesia católica y siempre había querido confirmarme, renovar mis votos, mi creencia. Solo me gustaría pedirle al Señor que me fortalezca”.

En ambiente de alegría y encuentro familiares, amigos y feligreses fueron tomando lugar en el templo para comenzar la celebración.

En la misa, los catequistas llamaron por su nombre a cada uno de quienes se confirmarían y el Padre Javier Concha, Párroco de la Parroquia San Antonio de Padua dio testimonio ante el cardenal Ezzati, de  la recta preparación de los jóvenes para el sacramento 

En su homilía monseñor  Ezzati  destacó que el sacramento de la confirmación “es un acto de Dios nuestro padre que con su amor nos viene a decir tú eres mi hijo y por eso podemos caminar serenos por la vida. La confirmación es un acto libre y responsable de cada uno ustedes en que   han dicho aquí  estoy ante la invitación de Dios”

Luego, el Arzobispo invitó a los confirmandos  a ser fieles al Señor “no tengan miedo, vivan su vida cristiana con confianza,  que se sientan de verdad siempre muy amados por el Padre Dios que sientan que la vida de Jesús crece en ustedes”. También los alentó a hacerse responsables de la fe recibida. “Que este sector sea una porción de la iglesia cada día más fiel, mas misionera, más entusiasmada del mensaje que el Señor es responsabilidad de todos los confirmados, ustedes son la iglesia”.  

Luego de la homilía y tomando con sus manos un cirio encendido, cada  joven se comprometió  a renunciar a aquello que impide seguir a Cristo. Luego, el obispo impuso sus manos sobre cada uno comunicándoles el Espíritu Santo para luego marcarlos con la señal de la cruz

Antes de finalizar la misa el Cardenal bendijo las cruces que cada una de las personas confirmadas llevará, como signo de pertenencia Cristo,  a la iglesia y de su ser misionero.

El padre Javier Concha, agradeció a nombre de la comunidad la presencia cardenal y le expresó su disposición a colaborar donde Dios lo necesite. “Como iglesia nos comprometemos en la evangelización donde nos envíe,  ahí estaremos para ser sal y luz del mundo”, señaló.